Un hombre murió este miércoles en el Machu Picchu al caerse por un abismo cuando se intentaba hacer una selfie fuera del vallado de seguridad. El cuerpo fue encontrado en una zona rocosa, según informó la Policía Nacional de Perú.

Oliver Prats, de 51 años, quiso tomarse la autofoto en el borde saltándose el cordón de seguridad que se marca para todos los turistas en la montaña del parque arqueológico y se cayó al vació por uno de los cerros que rodean a las ruinas de la ciudad inca. 

Un vigilante que se encontraba en el lugar de los hechos alertó a las autoridades para que intentaran rescatar al hombre, pero nada se pudo hacer por él. El alemán cayó por una zona rocosa y selvática en la que no pudo salvar su vida. Su cuerpo fue trasladado a la morgue de Cuzco y será próximamente repatriado a su país. 

Son muchas las personas que mueren por este tipo de acciones y caen al vacío por intentar sacarse selfies en el borde de los precipicios sin saber que esa fantástica fotografía que quieren tener será la última de sus vidas.