En medio de un paro docente que vació las aulas de profesores y alumnos, este viernes el salón auditorio de la facultad de Ingeniería desencajaba un poco con la consigna de la Coad. Nadie estaba, sin embargo, dando clase.

Allí estaban los decanos, docentes, no docentes, graduados y alumnos de las 12 facultades de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) que eligieron en asamblea a los nuevos rector y vice (ver fotogalería). No hubo ninguna sorpresa, excepto, tal vez, que el vicerrector fue más votado que el rector. La fórmula Héctor Floriani-Fabián Bicciré se impuso con más del 60 por ciento de los votos, aunque sin rivales. La oposición, rica en críticas y diatribas a la conducción de Dario Maiorana, no presentó candidatos; y así la alianza radicalismo-peronismo se renovó cuatro años más.

El debate se abrió temprano por la mañana. Pasadas las 8.30 ya todos los asambleístas estaban en su lugar y unos pocos manifestantes quedaban fuera, meta bombo, sobre avenida Pellegrini y con un piquete improvisado sobre calle Ayacucho.

Uno de los estudiantes que habló en la asamblea. (Alan Monzón/Rosario3.com)

Poco más de 20 oradores, la mayoría de la facultad de Ciencia Política, se pasaron el micrófono para denunciar unas veces, elogiar otras a la gestión Maiorana, que con el arquitecto y el comunicador social apostaba a la continuidad. Entre los cargos “ñoquis”, la precarización laboral docente, el hacinamiento de los estudiantes en sus aulas, y hasta la indemnización en 2007 al ya fallecido represor Jorge Pérez Blanco (a quien le habían dictado la falta de mérito), poco quedó por plantearle al rector saliente.

Algunas intervenciones pasaron sin pena ni gloria, la voz monótona de un consejero leyendo un programa de buenas intenciones o un listado de cuestionamientos ya conocidos, era aprovechada por gran parte de los asistentes para buscarse un cafecito, ponerse al día con el colega o pasarse el mate. Otras, provocaron verdaderos incendios.

Fue el caso del decano de Ciencia Política, Franco Bartolacci, que a poco tomar la palabra disparó cánticos e insultos de manera alternada. Un participante incluso mantuvo a fuerza de mucho pulmón una nota bastante afinada para impedir que se escuchase lo que decía el morado. La bandeja de arriba estaba dividida en tres colores, verde Alde; negro Santiago Pampillón; y rojo Franja Morada. Un joven radical incluso llevó la militancia al extremo y combinó la tintura del pelo con al carmesí de la remera.

Franco Bartolacci durante su discurso. (Alan Monzón/Rosario3.com)

Sin ahondar en demasiados argumentos, Bartolacci minimizó los planteos opositores –en su mayoría de la izquierda y agrupaciones independientes, aunque el Movimiento Evita también se mostró en contra de la alianza radicalismo-peronismo que hace tiempo gobierna la universidad– y tildó de “soberbios” a muchos de los consejeros estudiantiles.  

“No puedo creer la insolencia de algunos jóvenes que con una soberbia asombrosa hoy señalan con el dedo a compañeros que pusieron el cuerpo en la dictadura cuando ellos ni siquiera habían nacido”, les espetó. Arriba se multiplicaron los gritos y el bombo comenzó a sonar más fuerte.

Los gritos de alguno de los presentes. (Alan Monzón/Rosario3.com)

Finalmente, el momento de la votación llegó y uno a uno los 266 asambleístas pasaron al frente a dejar su voto en urnas transparentes que luego se llevó una concurrida junta escrutadora al salón contiguo. Casi 40 minutos después, los resultados volvieron pero los militantes del Alde no.

La fórmula (la única) Floriani-Bicciré fue la más votada; el comunicador social con más votos que el arquitecto. El flamante rector sacó 156 votos positivos, 75 votos en blanco y 35 abstenciones: y su vice, 171 votos positivos, 65 en blanco y 30 abstenciones.

Llegó entonces el momento de los aplausos, los abrazos y los besos. Poner los dedos en tres y cantar que “la universidad es morada “. Sí, y también un poquito peronista.

Floriani y un abrazo de felicitación. (Alan Monzón/Rosario3.com)

Maiorana tomó entonces la palabra, saludó a las nuevas autoridades y recordó los tiempos en los que las votaciones se realizaban en el patio del Politécnico o en la facultad de Arquitectura.

“Es fácil venir cada cuatro años y decir que no encuentran eco, que nadie escucha su voz y que todavía siguen construyendo un candidato o candidata, si seguimos en proyección, quizás dentro de 20 años logren construir un candidato y logren los votos para gobernar esta universidad”, les lanzó a los que por cerca de cuatro horas criticaron su gestión pero se fueron a la hora de escuchar el nombre de los ganadores. 

Floriani, tal vez más conciliador aseguró que “está abierto a recibir y escuchar a todos”.

“Intentaré ser el rector de toda la UNR”, concluyó.

¿Qué pasa con los docentes?

En medio de la asamblea, la secretaria adjunta de Coad, Patricia Propersi, se coló en el orden de palabra y tomó el micrófono con la aprobación del rector y los asambleístas. De espaldas a Maiorana –que durante las casi cuatro horas de la asamblea se mantuvo impávido ante una seguidilla de críticas y más críticas– convocó a todos los votantes a preguntarles a los candidatos qué postura pensaban tomar ante el conflicto salarial docente. Fracasada la reunión del lunes, los profesores nucleados en Coad iniciaron este jueves un paro de 48 horas en contra de la oferta del 27 por ciento desdoblado.

Rosario3.com les preguntó a los dos. Y ambos coincidieron en la legitimidad del reclamo. Floriani no quiso entrar en números pero Bicciré reconoció que el 27 por ciento ofrecido por el gobierno resulta insuficiente, aunque aclaró que en este punto la universidad está un poco atada de pies y manos.

“Los salarios los paga el Estado, pero todo lo que sea posibilidad de diálogo lo podemos iniciar”, dijo.