El candidato del Frente Justicialista para la Victoria, Roberto Sukerman, indicó que en caso de asumir el próximo 10 de diciembre "se terminará la política de inacción y de funcionarios de escritorio que solo relatan la realidad. Los rosarinos necesitan que sea el jefe municipal quien se haga cargo de sus problemas".

En ese sentido, el abogado constitucionalista y actual jefe de bloque del Frente para la Victoria en el Concejo, remarcó: "Tenemos un municipio de horario comercial, donde no se acompaña a la gente ni la intendenta encabeza las acciones que tanto se necesitan. Vamos a cambiar de raíz la filosofía de funcionarios de escritorio instalada por el socialismo y sus aliados y seremos un gobierno en acción permanente, con presencia continua y haciéndonos cargo de cada una de diversas problemáticas".

Sukerman indicó que "lamentablemente se han dilapidado cuatro de gestión y de lucha contra las mafias y la delincuencia con un gobierno agotado en ideas, acción y respuesta, que solo se ha victimizado y ocultado tras excusas insólitas y supuestas dicotomías políticas. El ciudadano necesita de un gobierno que actúe y que de respuestas a sus demandas y en ese sentido no podemos dar un salto al vacío".

Sukerman insistió en que en caso de asumir la intendencia realizará cambios profundos en el esquema de seguridad e impulsará la creación de una nueva policía municipal, proyecto de su autoría que ingresó hace más de dos años a la legislatura provincial y hace más de un año al Concejo local.

"Además de la presencia de fuerzas provinciales y federales en acciones coordinadas, el intendente debe ser el jefe político de una nueva policía con cercanía al vecino y con conocimiento de la situación local porque los rosarinos  quieren y necesitan un intendente que resuelva sus problemas. Festejar como lo hace el socialismo el regreso de gendarmería, que si bien es bienvenida, habla a las claras del fracaso en materia de politicas de seguridad tanto del gobierno Provincial como Municipal", expresó.

Por otra parte, Sukerman remarcó: “Creemos también que luego de cuatro años de aprobado, el socialismo debería dignarse a ejecutar mi iniciativa de descentralización judicial y que los fiscales tomen las denuncias en los barrios. Acercando, de esta manera, el acceso a la justicia de los vecinos. La comisarías no deben existir más como tales, los trámites adminitrativos deben ser tomados por dependencias municipales o provinciales y los detenidos alojados en el servicio penitenciario".