Un verdadero infierno. Así podría resumirse la vida de Daiana, al menos en estos últimos años. Se trata de una chica rosarina que, luego de ver en televisión el caso de una chica asesinada a puñaladas por su pareja esta semana, decidió hacer pública la denuncia contra su ex por reiteradas agresiones –algunas extremas– y amenazas.

La joven acudió a las cámaras del programa De 12 a 14 (El Tres) para brindar su desgarrador testimonio y pedir ayuda en medio de una situación desesperante.

Apunta contra Walter, su ex pareja, al que conoció hace cinco años cuando era “una persona diferente a la que se convirtió”, según cuenta. Al poco tiempo, los celos desenfrenados del muchacho fueron el principal motivo para comenzar un acoso que, de manera repetida, incluyó prohibiciones, golpes, duras advertencias y hasta secuestros en deplorables condiciones humanas. Sin contar, de acuerdo a su denuncia, una violación que sufrió de parte de este hombre cuando ya no estaban juntos, hecho que derivó en un embarazo hoy plasmado en su pequeña hija de un año y medio.

“Hace cuatro años que no tengo vida”, asegura Daiana, pero no quiere resignarse a pesar de que ya tuvo dos intentos de suicidio. “Tengo hechas más de 20 denuncias por golpes, además de la violación. Estoy esperando que me ayude alguien... Sólo quiero que los papeles se muevan en Tribunales. Cómo puede ser que –su ex– esté trabajando en una fábrica, haciendo una vida como si fuera una persona normal, cuando no está bien de al cabeza”, reclama.

Violencia en todas sus formas

“Me amenaza que me quiere pegar, que me va a matar; me manda mensajes a mí y a mi mamá, dice que no salga a la calle porque me va a pisar con el auto”, relata Daiana, conciente de que es víctima, además, de un maltrato psicológico. “Te maneja la cabeza de una forma impresionante”, reconoce.

Contó que Walter vive en el barrio 7 de Septiembre, donde varias veces la llevó contra su voluntad y, según detalla, en una ocasión la tuvo “tres días encerrada en el garage, sin comer ni tomar nada porque tenía que aprender las leyes que él imponía, y si no irme”. “Y si me iba, él me iba a buscar, me subía de los pelos al auto otra vez”, agregó.

Además, dijo que en una oportunidad hasta le tiró gasoil encima con la amenaza de prenderla fuego, siempre con imponiéndole la condición de que “si no estaba con él, no iba a estar con nadie”.

En otra de las aberraciones sufridas, la joven señaló que su ex pareja la llevó un día de un tatuador y la obligó a borrarse las iniciales de sus amigos que, contó, llevaba en su piel, porque si no, le iba “a romper la cabeza”.

“También le pegó a mi hija, que dice que no es de él. Y me mandó a pegar con unas chicas acá en la esquina de mi casa. Estuve internada en el Heca”, añade a la interminable lista de su sufrimiento. “Además lo denuncié por robos a mi familia, y tiene denuncias de robos en diferentes lugares”, sostuvo.

Las amenazas

Según se escucha en un audio reproducido al comienzo del video que acompaña esta nota, Daiana tiene en su poder los archivos que permiten probar, al menos, las amenazas más recientes, recibidas por notas de voz en su teléfono.

En las mismas queda en evidencia el tenor de las advertencias: “Un día vas a terminar mal, boluda. Vas a terminar mal. Yo te vengo perdonando porque sos la madre de una nena. Pero quedate bien tranquila que el día que a mí no me importe nadie, va a cagar fuego el que cague. Yo me voy a morir pero atrás mío se van a morir varios también, eh. Que después hagan lo que quieran, pero yo ya le maté a la hija, maté a todos”.