La aplicación digital Uber que conecta usuarios con conductores particulares busca hacer pie en Argentina y generó alerta en Rosario. No sólo en los taxistas y remiseros. El concejal Sebastián Chale aseguró que el sistema “forma parte de una competencia desleal al taxista”, aunque advirtió que el ruido que genera su eventual aplicación desnuda falencias en el servicio.

“Los coches de alquiler son un servicio público y el Estado otorga una licencia. Cuando lo hace, también le carga algunas obligaciones al taxista”, dijo el edil radical, quien aclaró que como Uber no cumple con esos requisitos, constituye “una competencia desleal” al trabajador de volante.

Chale hizo dos aclaraciones: primero que es cierto que hay choferes que no cumplen con la normativa -aunque “ese es otro debate”, apuntó- y segundo que si este sistema “tiene el impacto que tiene es porque hay satisfacción de los usuarios”.

“Esto no deja de poner en discusión la necesidad de modernizar el servicio de taxis y remises”, añadió.

“De todos modos, sí hay un piso de exigencia al auto de alquiler que en este caso no tiene, porque es un servicio que se da por fuera”, señaló y destacó que no se enmarca en la legislación actual.

En el mismo sentido se pronunció José Iantosca, de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar). "Es la gran remisera trucha del mundo", dijo sobre la empresa titular de la aplicación y anuncio que la marcha nacional del 6 de mayo también tendrá una representación local.