La falta de tampones volvió a sentirse en las góndolas de supermercados y farmacias, incluso las de Rosario, desde donde el Colegio de Farmacéuticos dijeron que entró una remesa pero se agotó enseguida.

Lo cierto es que, más allá del anuncio de que la “corrida del tampón” estaba superada, en estos días es casi una misiñón imposible conseguir una caja de OB o Kotex. En cambio, no hay problemas con la provisión de toallas femeninas.

Miguel Ponce, ex gerente de la Cámara de Importadores y actual director del Centro de Estudios para el Comercio Exterior Siglo XXI, estimó que la nueva escasez de tampones se deba a "un cambio cultural de las mujeres que, traumadas ante la falta del producto, salieron a comprar en cantidad para autoabastecerse".

En tanto, desde el Colegio de Farmacéuticos de Rosario advirtieron que se hace complicado hacerse de tampones, pues los proveedores habituales no los tienen.