El hallazgo de otros dos cuerpos sin vida elevó a siete la cantidad de víctimas fatales causadas por el fuerte temporal de lluvia que se registró este domingo en localidades de las sierras chicas de Córdoba, la capital provincial y sus alrededores, en tanto una muchacha de 21 años continúa desaparecida y un millar de personas permanecen evacuadas, según los datos oficiales del Comité de Crisis provincial.

El gobernador José Manuel de la Sota decretó tres días de duelo y expresó las condolencias para con las familias de las víctimas y con las personas afectadas por el “terrible temporal” que, entre otras consecuencias, dejó como saldo graves daños materiales, rutas y puentes destruidos, además de la interrupción de servicios.

El Comité de Crisis provincial confirmó este lunes el hallazgo de otros dos cuerpos sin vida, una nena de 5 años y un muchacho de 35 que fueron arrastrados por los ríos desbordados en Río Ceballos y en la zona de Ascochinga, mientras que la única persona que continúa oficialmente desaparecida es Mariana Di Marco, quien ayer se encontraba en un campamento de Scouts en las adyacencias de río La Pampa, en el departamento Colón.

De la Sota manifestó que “el nivel de las aguas está bajando” y que “de a poco la situación comienza normalizarse”, lo que permite paulatinamente mejorar las condiciones para recuperar las zonas afectadas, particularmente los servicios y la transitabilidad vehicular en las rutas.

El Comité de Crisis dispuso de helicópteros para el relevo aéreo de los puentes, rutas y ubicar los vehículos arrastrados por el agua.

En tanto, organizaciones políticas, sociales, instituciones y referentes ciudadanos se sumaron a una movida solidaria para ayudar a los damnificados, mientras las delegaciones de organismos nacionales en Córdoba dispusieron de sus estructuras para ponerse a disposición de los cordobeses afectados.

También se reforzó la seguridad para evitar los actos de vandalismos en las viviendas que debieron ser evacuadas, mientras que las empresas prestadoras de servicios montaron un operativo para recuperar la energía eléctrica, telefonía, Internet y el agua potable.

En tanto, este lunes a la mañana el clima se había normalizado y no se registraban lluvias luego de las fuertes precipitaciones que, en algunos casos, superaron los 300 milímetros.