Una semana después de que Ariel Diwan asegurara en televisión que Ian, el pequeño que compartía con Gisela Bernal, no era hijo biológico suyo, la bailarina decidió romper el silencio para aclarar la situación. En el programa de Chiche Gelblung, Bernal aseguró la paternidad del productor.

"Su comportamiento del sábado para acá mostró su verdadera cara, que yo en otros momentos no quería ver. Siempre quise sostener la relación con él pero hay cosas que realmente son insostenibles", relató la bailarina de Stravaganza.

Con respecto a la ruptura en la que ella se fue a Jujuy y se enteró del embarazo, la rubia explicó: “o era libre y tenía varias relaciones. Él también”. “Yo le comuniqué por teléfono que estaba embarazada. Nosotros no nos cuidábamos en nuestras relaciones. Era normal (por el embarazo) que eso pasara”, recordó la bailarina.

“Me dijo una frase que marcó el resto de nuestra historia. Si este bebé es mío, o no es mío, de todas maneras es mío. Claramente él entendió que esta criatura era nuestra” agregó.

“Una vez, en un momento de enojo durante el embarazo, me hizo el planteo del ADN. Yo no acepté porque corría riesgo la vida de mi hijo. Nunca más me habló de un ADN”, subrayó Gisela, que aseguró que eran una "pareja abierta" en un principio.

La bailarina hizo alusión además a algunas situaciones violentas vividas en la relación y mencionadas por Diwan, pero su versión descargó la responsabilidad agresiva en su ex pareja. “La relación estuvo marcada por la agresión, pero no precisamente de mi lado”.

“Yo nunca fui de decir tantas malas palabras hasta que lo conocí a Ariel. Cuando uno está inmerso en una relación así no se da cuenta y lo naturaliza”. “Me llegó a empujar, agarrar de los brazos y zamarrear, pero no a golpes de puño”, detalló Bernal.

“Tenía miedo, por eso me fui. No quería que llegue el golpe”, dijo la bailarina y se quebró: “Decidió no someterme a esa situación. Un golpe de él podría hasta matarme”.