Los hay de batata. Los hay de membrillo. Los hay de manzana. Y hasta ¡de jamón y queso! Y si bien estos dos últimos entran en la categoría de “pura imaginación”, los dos primeros reconocen una fuerte tradición entre los platos elegidos para celebrar un feriado (y alguna que otra merienda también, claro).

Pero, ¿cuántos y cuántas saben hacerlos?

Pues bien, para quienes creen que eso de montar dos capas de masa hasta lograr una forma de estrella con un cuadrado de dulce en el medio es cosa de dotados, aquí va una receta sencillita que tomamos de la web de Cocineros Argentinos.

Los ingredientes

Para la masa de hojaldre necesitás: harina cuatro ceros, 500 gramos; manteca, 100 gramos; agua 250 cc (un vaso, más o menos); una pizca de sal y una cucharadita de jugo de limón.
Para hojaldrar: margarina y almidón de maíz, en cantidad necesaria.
Para el relleno: dulce de membrillo (o batata) 250 gramos.
Para el almíbar: medio litro de agua y 300 gramos de azúcar.
Además, aceite –o grasa– para freír

Manos a la masa

Primero hay que arenar los ingredientes de la masa y unirla. Después, dejarla descansar.

El paso a paso de la masa indica que primero hay que estirarla a lo largo –bien fina–, formando un rectángulo. Una vez estirada, untar la masa con margarina pomada. Espolvorearla también con almidón de maíz.

Luego, enrollar la masa y aplastar con la mano el rollo para bajar a rectángulo. Dejar descansar y estirar nuevamente bien fina. Volver a untar con margarina y espolvorear con almidón de maíz. Volver a enrollar y a estirar bien fina.

Hecho esto, hay que cortar en rectángulos de 8 a 10 centímetros de lado.

En cada cuadrado de masa, colocar un cubito de membrillo o el “relleno” que elegiste. Después, cerrás con otro cuadrado de masa pero, tratando de altenar las puntas (que no coincidan).

Para terminar, apretar los pliegues en cada extremo y ¡a freír!

Una vez dorados, dejarlos secar en un papel y pincelar con almíbar.

Buen provecho.