Desde hace unas semanas un grupo de puertos cerealeros y exportadores de granos viene advirtiendo en conversaciones privadas que el mantenimiento de la hidrovía que hace el gobierno nacional no está al ritmo de las necesidades logísticas del sector generando sobrecostos operativos porque los barcos deben salir con menos carga y demoran más en transitar por el río. Y temen que con la nueva bajante que se pronostica en el río la navegabilidad empeore.

En rigor, lo que advierten los usuarios del sistema troncal de navegación es que durante la concesión privada (que terminó a mediados del año pasado) cuando había que hacer tareas puntuales para mantener la fluidez del tránsito de barcos, como sumar unos centímetros de dragado en pasos críticos,  la empresa (Hidrovía SA, formada por Jan de Nul y Emepa) los hacía de manera inmediata, siempre con autorización de la subsecretaría de Puertos y Vías Navegables.

Pero desde que el Estado tomó la concesión de la hidrovía, la empresa dragadora contratada (Jan de Nul) no puede hacer ninguna de esas tares puntuales porque la subsecretaría se demora mucho en habilitar una tarea extra. Incluso, señalan que hay tareas que no se terminan ordenando. 

Si bien en el sector privado hay una buena impresión de la labor profesional que viene llevando hasta ahora la Administración General de Puertos (AGP), que se tuvo que hacer cargo de un día para el otro de la administración del sistema troncal de navegación, a las agroexportadoras les preocupa que cuando en breve se profundice, otra vez, la bajante los retrasos en habilitar tareas de mantenimiento encarezca los costos operativos del sector. Si bien la AGP tiene la administración, las autorizaciones para las nuevas obras las debe dar la subsecretaría de Puertos y Vias Navegables de la Nación. 

Fue asi que puertos y exportadores llevaron sus quejas a las entidades que los representan. Y es por eso que la Bolsa de Comercio de Rosario, la Cámara de Puertos Privados y la Cámara de Actividades Portuarias armaron un comunicado muy cuidado en la que de una manera muy diplomática (y hasta encriptada) hacen una referencia al tema buscando ponerlo en la mesa pero sin ofender a la AGP,  al Minsiterio de Tranporte de la Nación o las propias entidades ambientalistas porque todo este proceso está en un estado político muy delicado. 

Con todo, en el comunicado difundido este mediodía igual -y de una manera también muy delicada- deja trascender la preocupación de los usuarios de la hidrovía por la falta de certidumbre en el avance de la licitación de fondo -que establecería mejoras imporantes, como más profundidad, nueva zonas de radas y maniobra y tecnología de la navegación- que tiene que realizar el gobierno nacional.

A continuación, el comunicado completo:

"Las entidades emprsarias que reúen a los usuarios de la hidrovía expresaron este miércoles su "preocupación por el crítico panorama que atraviesa la actividad portuaria, y que afecta severamente la competitividad de las exportaciones, debido a la grave situación que estamos atravesando en el marco de la Emergencia Hídrica, producto de la bajante extraordinaria de los ríos Paraguay y Paraná".

Esta situación obliga a transportar mercadería hacia otros puertos argentinos por vía terrestre, con el consiguiente impacto sobre la seguridad vial, el mayor deterioro de la infraestructura vial y ferroviaria y el aumento de los costos logísticos.

Tampoco puede soslayarse la circunstancia que atraviesa el proceso de contratación de los trabajos de dragado de la vía navegable troncal en el marco de la Licitación Pública N° 13/21 lanzada por la Administración General de Puertos y cuyo objeto es contratar, para el corto plazo, el “Dragado de mantenimiento de la vía navegable troncal”, teniendo en cuenta que dicha licitación se ha dejado sin efecto.

En este contexto, es importante destacar la importancia del proceso de llamado a la denominada “licitación larga”, para la modernización y mantenimiento del sistema de señalización y dragado de la vía navegable troncal, en el marco de lo establecido en el Decreto N° 949/20, cuya tramitación  debe llevar a cabo el Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable y de la que sería muy importante conocer un calendario de concreción que permita contar con un horizonte realista, que disminuya la incertidumbre.

Por todo lo señalado, es necesario reiterar la necesidad de continuar con aquellas tareas de mantenimiento de la vía navegable que garanticen su operación y avanzar en los procesos necesarios para dotarla de mejoras en su diseño e incorporación de la tecnología de punta que una infraestructura de estas características merece".