El frente judicial de la agroexportadora en default Vicentín está tan complicado que en el mismo día en el que le compañía le bajó el tono al millonario embargo que le trabó la Cámara de Apelaciones de Resistencias por el uso de facturas apócrifas, acreedores difundieron más detalles del resultado de la auditoría forense que pueden compicarlo penalmente.

Con respecto al embargo, impulsado por la Afip, la firma comunicó que "se trata de una medida cautelar que será recurrida en la instancia judicial correspondiente y que entendemos, carece de fundamentos ya que contiene una evidente intencionalidad y animosidad contra la empresa". 

"De ninguna manera Vicentin SAIC ha declarado o interactuado con proveedores que no estuvieran debidamente acreditados por la AFIP, que es la autoridad competente, si alguno de los miles de proveedores que se vinculan con la compañía en algún momento incurrieron en algún incumplimiento con la autoridad, es precisamente responsabilidad de la misma su identificación y penalización", señalaron desde la firma.

De las declaraciones preliminares en el proceso judicial que se sustancia actualmente, ya se han registrado contundentes declaraciones de algunos de los propios funcionarios del organismo regulador que no han podido determinar la comisión de delito alguno por parte de la compañía ni tampoco determinar la motivación o beneficio aparente para que la empresa tuviera responsabilidad en la irregularidad que se le intenta atribuir.

"En relación con lo dicho anteriormente el monto referido como suma millonaria evadida o incumplida representa menos del 0,1 % de las operaciones registradas y declaradas por la empresa durante el período de referencia", resaltan.

"Una vez más queda a la vista que la empresa sigue siendo objeto de un recurrent. y sistemático proceder político y judicial que busca afectar las posibilidades de recuperación de la compañía y que en nada contribuye a los genuinos esfuerzos y avances que la misma ha venido realizando en pos de reestructurar su deuda y alcanzar los acuerdos necesarios con sus acreedores", resalta la empresa.

En paralelo al comunicado de Vicentín, este viernes acreedores de la empresa difundieron resultados de la "auditoría forense" que la agroexportadora ocultó pasivos por 858 millones de dólares en el período anterior al default. Al ocultar esa deuda, la aceitera pudo lograr que los bancos internacionales le sigan habilitando el financiamiento. Ocultar su pasivo también generó una sensación de fortaleza entre los productores agropecuarios que siguieron entregándole granos, que finalmente no pagó.

La auditoría, de 256 páginas, fue encargada por el juez que lleva la convocatoria de acreedores, Fabián Lorenzini, pero sus resultados refuerzan las líneas de investigación del Ministerio Público de Acusación (MPA) y los acreedores que denunciaron a la empresa por estafa. Abogados de los acreedores denunciantes esperan que en breve, la fiscalía impute a todo el ex directorio de Vicentín por varios delitos, entre ellos la administración fraudulenta.