El clasiquito fue para los pibes leprosos

En reserva, Newell’s sí pudo consumar su tercera victoria consecutiva en clásicos. Fue 2 a 1 para los chicos dirigidos por Ricardo Johansen, reforzados por algunos integrantes del plantel profesional. Damián Steinert, la gran figura del encuentro, marcó el de la apertura con una notable definición y aumentó un rato después Juan Manuel Cobelli. Castillejos marcó el descuento auriazul. Los once rojinegros de arranque, que terminaron trepados al alambrado de cara a los hinchas rojinegros, fueron: Hoyos; Chávez, Machuca, Fideleff, Díaz; Aguilar, Casio, Vaca, Zanni; Steinert y Falcone.

Barbijos, globos, gritos y butacas

Los 3.900 fanáticos rojinegros que pudieron estar en el Gigante vivieron con mucha adrenalina la soleada tarde en Arroyito. Llegaron muy temprano por Boulevard Avellaneda, muchos de ellos con barbijos tapándoles sus bocas. Con el triunfo de la reserva, la popular baja de Génova se tiñó de rojo y negro con globos de diferentes formas y tamaños. Y la explosión llegó con el inolvidable golazo del Gato Formica. Lo único reprochable de la jornada en la tribuna visitante fueron los destrozos que provocaron los leprosos una vez terminado el partido, arrancando butacas y tirándoselas a los plateístas canallas.

La estadística no falló

Hasta aquí, se habían jugado 15 clásicos rosarinos en el mes de mayo, con cuatro victorias de Newell’s, dos de Central y 9 empates, 6 de los cuales habían sido 0 a 0. Con este 1 a 1, la cuenta de las igualdades en este otoñal mes del año llega a la decena. Además, el resultado de esta tarde cortó con una seguidilla de cinco derbys que venían terminando con victoria para alguno de los dos.