El juez federal, Ariel Lijo, analizará la denuncia del fiscal especial de la causa Amia, Alberto Nisman, contra la presidenta Cristina Kirchner, el canciller Héctor Timerman, Luis D’Elía, Fernando Esteche y el diputado Andrés Larroque. En ese momento, el magistrado enviará la causa al fiscal Ramiro González para que opine si debe o no hacerse cargo del expediente.

Según informó el portal Infobae, es probable que el fiscal González considere que la denuncia es un hecho nuevo y recomiende que la causa vaya a sorteo. En caso de elegir un nuevo magistrado, este tiene la posibilidad de rechazar el expediente al entender que le corresponde a Lijo, con lo cual se podría plantear una cuestión de competencia que debería resolver la Cámara Federal.

Cabe mencionar que la única medida que tomó el juez Lijo fue ordenar desgrabar las 5.000 horas de escuchas telefónicas. Se estima que hasta tomar el expediente en febrero, cuando finaliza la feria judicial, no habrá otra determinación.

El fallecido fiscal Alberto Nisman había presentado su denuncia en el despacho del juez Ariel Lijo porque intervino en la causa paralela del caso Amia, donde se intenta corroborar si hubo irregularidades en la investigación del atentado que tuvo lugar en julio de 1994.

Por otra parte, la jueza María Romilda Servini de Cubría, que estaba a cargo del juzgado de Lijo durante el verano, entendió que el dictamen de Nisman no reunía méritos para levantar la feria judicial. Tras la muerte del fiscal, Lijo adelantó su regreso y reasumió en su juzgado y ordenó que se protejan las pruebas que respaldan la denuncia realizada. También l. solicitó al Gobierno los nombres de los supuestos agentes de inteligencia que menciona la presentación.

Una vez que la causa tenga un juez definitivo, es que pase a manos del fiscal que le corresponda para que analice si le encuentra mérito para llevar adelante una acción penal contra la Presidenta y el Canciller, y que así queden formalmente imputados.