El mediocampista ofensivo Alan Ruíz fue agredido este miércoles por los barrabravas de Colón al finalizar el entrenamiento que se realizó en el predio del Sindicato Argentino de Televisión, ubicado en la localidad de Arroyo Leyes. Tras el hecho, el jugador dejó la ciudad junto con su familia. No jugaría el clásico ante Unión este sábado.

Un grupo de 30 barras se acercó hasta la práctica del plantel sabalero para hablar con algunos referentes del equipo y al finalizar la misma, uno de ellos agredió físicamente a Ruiz "lanzándole un puñetazo", según reveló un testigo.

Posteriormente una decena de barra bravas fueron detenidos por la Policía a la altura de la Fuente de la Cordialidad, en la ruta 168, y que se encuentran a disposición en la Jefatura por "averiguación de antecedentes", además de haber sido secuestrados tres autos.

Aunque no hubo denuncia policial por parte del jugador ni de los directivos sabaleros, Enrique Ariotti, presidente en ejercicio de la institución, reconoció el lamentable episodio.

Sin embargo, fuentes del club indicaron que Ruiz, de 22 años, no quiso realizar la denuncia, pero anunció que junto a su hermano Federico, de 26 y que también juega en Colón, y sus familias dejaban la ciudad para trasladarse a su casa familiar en La Plata. 

Ruiz, quien es seguido por Gerardo Martino como posible integrante del seleccionado para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, fue vendido recientemente por Colón al Sporting Lisboa de Portugal, y al igual que su hermano Federico, firmaron un contrato por cuatro años con el club europeo.

El club santafesino acordó su venta en 5,5 millones de dólares, luego de hacer uso de la opción y comprarle el pase a San Lorenzo por un valor de 2,5 millones.