En Rosario Central, las miradas apuntan al cuádriceps derecho de Lucas Gamba, el delantero que se lesionó ante Colón en esa zona y cuya presencia en el próximo partido ante Newell's, a jugarse en doce días, quedó en duda. 

Recién este martes por la tarde le harán estudios al atacante canalla que acabó el partido con esta dolencia. En el mejor de los casos, será una contractura de la que podría recuperarse a tiempo; el peor escenario sería un desgarro y allí ya no lo contarían ante la Lepra.

A Diego Cocca se le abre un paréntesis de incertidumbre hasta que se sepa qué le pasó al ex Huracán: y si definitivamente no lo tiene a disposición, habrá que ver a quién pone en su lugar. Ya sin Lovera, una chance sería que se adelante Ciro Rius y entre otro volante; otra, que arriba jueguen Riaño-Ribas.

Rius podría adelantarse a jugar como atacante.


Por otra parte, este martes el entrenador se reunirá con los dirigentes para definir si van o no por otro refuerzo, gestión que podrían hacer sólo hasta el jueves y con jugadores que no actúen en nuestro país.

Claro que no será sencillo por varios motivos: uno, el escaso tiempo; dos, la rareza de hallar un buen jugador del exterior que no esté siendo utilizado con la temporada en marcha; y tres, que el club de origen del futbolista en cuestión decida prestarlo.

Es que si bien la situación financiera cambió con la venta de Lovera a Grecia, que oxigenará las arcas hasta mayo del año que viene (y en diciembre entraría dinero por Ruben, Elías Gómez y Ávila, el juvenil de Boca), no hay disponibilidad para encarar una compra. Y así, parece difícil que vaya a llegar otra cara nueva a Arroyito.