Ya dijo Frank Kudelka que no es objetivo a la hora de hablar de Pablo Pérez, dando a entender que el volante es una "debilidad" y que lo recibiría con los ojos cerrados y los brazos abiertos en el plantel de Newell's. Y eso podría suceder en el transcurso de este martes.
Esta es una jornada decisiva para que se concrete el regreso del mediocampista al club del Parque, ya que se vence el plazo especial que AFA les dio a ambos clubes para sellar una transferencia fuera de término (el libro de pases se venció el viernes pasado).
En horas del mediodía dirigentes de Independiente se reunirán con el representante del volante, Jorge Bilicich, para tratar de llegar a un acuerdo en la rescisión del contrato. La clave es la deuda que el Rojo tiene con Pérez y la forma de pago: los de Avellaneda propondrán abonársela en 18 cuotas.
Pérez, que en principio exigía el pago contado, ahora aceptaría ese plan ya que le permitiría (junto a lo que le pagará Newell's) mantenerse cerca del nivel de ingresos que tenía por contrato en el Diablo y cumplir el sueño de regresar al Parque.
El técnico de Independiente, Lucas Pusineri, es el único que se opone a la salida del futbolista, ya que considera que jerarquiza un plantel diezmado por las ventas. Los dirigentes, en cambio, son proclives a dejarlo ir: tiene un contrato muy alto y saben que los hinchas le perdieron la paciencia por sus costantes expulsiones.
Las conversaciones entre los dirigentes ñubelistas y PP8 están muy avanzadas: llegaría libre, firmaría contrato por dos años y medio y ganaría un dinero alto pero accesible para las arcas de la institución.
De concretarse, sería la tercera etapa de Pablo Pérez en Newell's: la primera fue desde su debut en 2006 hasta 2009 y la segunda de 2011 hasta 2014, con el título de la mano de Gerardo Martino incluido.
