Mientras Rosario Central espera el entrenamiento de este miércoles por la tarde ya en suelo venezolano, a donde arriba sin su arquero Jorge Broun, los dirigentes aún lamentan la frustrada gestión por Wilder Cartagena, el volante peruano que parecía tener un pie en Arroyito.

La pregunta de todos los hinchas por estas horas es: ¿qué pasó? Porque tan cerca estaba de ponerse la camiseta auriazul que hasta lo habían anotado en la lista de 50 futbolistas que jugarán el torneo continental desde esta fase de octavos de final. Pero al cabo, se marcha al Galatasaray de Turquía. 

Lo que sucedió es que no sólo había una "demora administrativa", como decían desde el círculo íntimo del ex Godoy Cruz. Evidentemente, al representante del jugador le llegó una oferta formal del club turco cuando estaba a punto de firmar contrato con los canallas, que no pueden competir con el club de oriente medio.

Claramente, el contrato que percibirá en Galatasaray (el 21 de julio se jugará la clasificación a la Liga de Campeones contra el PSV holandés) será mucho más alto que el cobraría en Rosario, pero además habría una compra de un porcentaje del pase mientras que Central le proponía un préstamo por dieciocho meses. 

Cuando el llamado turco pasó de ser sondeo a propuesta oficial, el futbolista decidió armar las valijas pero hacia Estambul. Y ahora Rosario Central deberá decidir qué hace con Rodrigo Villagra y Fabián Rinaudo, que parecían alejarse del club pero ahora podrían tener alguna chance de continuar.