A falta de cinco días para el encuentro del próximo miércoles a las 18.45 ante Banfield (arbitraje de Fernando Rapallini), por la undécima fecha de la Liga Profesional, el cuerpo técnico canalla recibió una buena noticia: Marco Ruben ya pudo trabajar junto a sus compañeros.

El delantero venía entrenando de manera diferencia tras haber sido golpeado por el zaguero central de Boca Juniors, Carlos Izquierdoz, en el cotejo que el Canalla perdió el último sábado por la noche.

De este modo, la presencia del 9 en el choque con el Taladro está prácticamente garantizada.

Los jugadores que aún siguen sin poder entrenar junto al grupo son Nicolás Ferreyra y Milton Caraglio, defensor y delantero que no venían siendo titulares.

El Fosa arrastra una dolencia producto de un impacto recibido en el entrenamiento, mientras que el Gordo sufrió antes de jugar con Boca un pellizco meniscal.

Ambos están entre algodones, pero hay optimismo en que puedan integrar el banco de suplentes.