La situación de Javier Pinola fue cambiando en forma radical en este 2016. Arrancó siendo una de las figuras del equipo de Coudet hasta que se fracturó la tibia en un partido de Copa Libertadores. Asumió una buena recuperación y hace algunos días confesó que estaba ilusionado con estar en el clásico “aunque sea en el banco”, pero en una de las últimas prácticas sufrió una nueva fractura, podría ser operado y ya se sabe que no podrá volver a jugar hasta el año que viene.

El médico del plantel profesional de Rosario Central, Marcos Diez, detalló que Pinola, quien se encontraba recuperándose de una fractura de tibia luego de 5 meses de su cirugía, el día lunes chocó con un compañero en un entrenamiento y sufrió una “fractura incompleta” por encima de la lesión previa, que “retrasa la recuperación y el retorno a la actividad deportiva hasta el año próximo”.

"Estamos evaluando con el jugador el criterio a adoptar. Una posibilidad es operarlo y hacer un recambio del clavo endomedular, y otra es aplicar un criterio más conservador y esperar la evolución de la lesión, pero en ese caso corremos el riesgo de que no sea la esperada y después hayamos perdido tiempo para hacer la operación", explicó el médico a Télam.

Pinola había sufrido la fractura de tibia derecha el 13 de mayo, en el partido de ida por los cuartos de final de la Copa Libertadores de América, que Central le ganó a Atlético Nacional de Medellín.

El martes de esta semana, Pinola chocó con un compañero durante un ejercicio de tenencia de pelota, durante una práctica en Arroyo Seco, y sufrió una fisura cuatro centímetros arriba de la fractura, a raíz de la cual guarda reposo deportivo y podría ser operado este fin de semana.