Diego Osella aceptó que el plantel que encontró en su arribo a Newell’s está golpeado anímicamente. Pero también le apuntó a la preparación física del grupo. “No tenemos chispa y terminamos con mucha gente acalambrada y pidiendo el cambio”, tiró.

“Hay que trabajar mucho, llevamos ocho días en el club y necesitamos mucho trabajo”, arrancó el DT. “No puedo evaluar qué se hizo antes, sí cómo lo sentimos desde que llegamos. Me han tocado situaciones difíciles, pero soy optimista por el plantel que hay. Trataremos el tiempo prudencial para llevarlo a la intensidad que queremos”, agregó.

Para Osella, “la sensación es que nos falta chispa para arrancar. El fútbol es arranque, pero tenemos diez entrenamientos en ocho días y muchos fueron a la parte táctica. Estamos en una situación complicada, no se le puede pedir paciencia más a nadie”.

“Nosotros no estamos accionando: estamos reaccionando, que es distinto. Hay que llevar a los jugadores a otro ritmo y para eso se necesita trabajo. Terminamos con mucha gente acalambrada, muchos pidiendo el cambio porque no llegamos a esa intensidad que pretendemos”, disparó.

Sobre el juego de esta noche, señaló: “Habíamos planteado un partido desde la búsqueda de marcar, recuperar y salir. Tapamos, pero no con la agresividad que se pretende. Y cuando la recuperábamos, a los tres toques perdíamos el balón. Abrieron el marcador con todo el equipo en nuestra área a un minuto del final del primer tiempo”.

Osella explicó: “Ante la falta de intensidad, intentamos disimularlo con el orden, pero en algún momento se pierde al estar en fatiga o deuda de oxígeno. Nosotros reaccionamos, no accionamos, y es difícil. El material está, necesitamos tiempo y trabajar mucho sobre la cabeza del futbolista. Soy optimista por naturaleza”, cerró.