Rosario Central hizo lo que tenía que hacer. Después del empate en Venezuela, salió decidido a ganarle a Deportivo Táchira en el Gigante de Arroyito y eso hizo. Con una gran definición de Emiliano Vecchio, la figura del partido, marcó la diferencia de un encuentro con muchas situaciones. La gran mayoría para los del Kily pero los visitantes también tuvieron las suyas. Ahí fue cuando apareció el arquerito Romero para responder con solvencia. Con un global de 3 a 2, el Canalla es el único equipo argentino que accede a los cuartos de final de la Copa Sudamericana, donde lo espera Bragantino de Brasil.

Central salió con todo a presionar y a marcar la diferencia. Estuvo varias veces muy cerca de romper el cero, pero por intervenciones del arquero venezolano o por definiciones desacertadas, le costaba llegar a esa conquista que le daría tranquilidad.

El mexicano Luca Martínez Dupuy hizo revolcar a Cristopher Varela. Vecchio no podía en la puntada final adentro del área. El Pupi Ferreyra se empecinaba en buscar una definición casi imposible. Marinelli y Zabala buscaban de afuera del área y la pelota no entraba por centímetros. Blanco llegaba con fuerza desde atrás pero no daba en la tecla.

Y toda esa ansiedad canalla por llegar a la diferencia tranquilizadora, la tenía que calmar el jugador con más experiencia y jerarquía del equipo del Kily: Emiliano Vecchio.

Hubo que esperar hasta los 41 minutos de ese primer tiempo, pero valió la pena: el 10 canalla entró lanzado por el costado izquierdo del área venezolana y on un solo movimiento de su cuerpo engaño a su marcador y al arquero y hundió la pelota en el arco vacío. Una definición tope de gama.

La segunda etapa transitó más o menos por los mismo caminos. Solo que Central ya no atacó con tanta intensidad porque sabía que Táchira debía convertir dos goles para pasar. Y el conjunto venezolano, por la inercia de saberse afuera, fue a buscar con un poco más de decisión.

Así llegaron un par de tiros libres y un cabezazo en el área, que pusieron a prueba al arquerito de Central, que jugó otra vez por el covid positivo de Fatura Broun. Y Romero respondió fenomenal en todas. Almada también salvó una sobre la línea con su cabeza.

Pero Central ganó bien la serie. Incluso debió hacerlo por una diferencia mayor. Y ahora el Kily tendrá tiempo para preparar el equipo y para sumar a gente de experiencia que se perdió esta llave, como Jorge Broun, Marco Ruben y Milton Caraglio.

Espera Bragantino, uno de los conjuntos de mejor rendimiento en la Sudamericana. Pero quién le quita el sueño a este Central que llegó por primera vez a los cuartos de final de esta Copa y es el único argentino en esta instancia superior.