A pedido de la Unión Industrial Argentina (UIA), el Gobierno estudia autorizar el regreso al trabajo de toda persona mayor de 60 años o perteneciente a grupos de riesgo que ya haya sido vacunada contra el coronavirus. Industriales santafesinos que integran la central fabril avalan esta posibilidad, al igual que constructoras locales.
La UIA lleva tiempo reclamando medidas por las licencias covid, que suponen seguir pagando sueldos a personas que hace un año que no trabajan. Ya sin la ayuda del ATP, se advirtió al Gobierno que muchas empresas no podrán soportar otro año con este tipo de cargas, teniendo en cuenta que además del salario del licenciado hay que abonar el del reemplazo en un contexto de demanda planchada.
De acuerdo con una encuesta de la UIA, la industria tiene al 12,5% de su personal dispensado por pertenecer a grupos de riesgo. Se trata de unas 125.000 personas si se tiene en cuenta que hay 1 millón de trabajadores en la actividad manufacturera. Es por eso que esta resolución que estudia la cartera de Salud de autorizar el regreso al trabajo de los vacunados es vista con buenos ojos para aliviar la situación.
No obstante, no pasa desapercibido el lentísimo proceso de inoculación que se está llevando adelante, ya que recién se está vacunando a mayores de 70 años, y en algunas provincias a quienes tienen más de 75. Mientras tanto el Gobierno rechazó la propuesta de empresas de comprar vacunas para su personal.
Desde el comercio también se mostraron preocupados por las licencias. Este sector, junto con servicios, emplea a 3,8 millones de personas, de los cuales también el 10% se encuentra dispensado. Al igual que la industria y la construcción, quieren avanzar con una solución para este tema antes de que se endurezcan las restricciones por la segunda ola.
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