En el panel “Futuro. Empresarios, liderazgo y contagio”, del 55º Coloquio de Idea, se discutió sobre la realidad de los diferentes sectores, pero al mismo tiempo sobre los cambios a nivel económico mundial que hacen que los límites entre cada uno de los sectores estén desdibujados y se necesitan unos a otros para avanzar.

Hicieron eje la necesidad de crecimiento de la industria del software, un sector pujante, y el panel contó con la presencia del CEO de Mercado Libre, Marcos Galperín. Asimismo, discutieron acerca de la reforma tributaria. 

“La ley del software, transformada ahora en Ley del conocimiento, es un ejemplo de cómo Argentina puede hacer las cosas a través de distintos gobiernos generando políticas de Estado, generando una industria competitiva, sin necesariamente dar subsidios”, aseguró Galperin.

“Estamos transitando la cuarta revolución industrial hace rato y ya no podemos separarla por sectores. Hay que tener una visión integradora. Para terminar con el hambre no solo hay que crecer sino distribuir. No tenemos que crecer de cualquier manera. El mundo no está debatiendo los términos de su crecimiento, es un mundo ultracompetitivo que está metiendo todos los cañones a la aplicación de la tecnología y en la agregación de valor”, advirtió Carolina Castro, empresaria de Industrias Guidi y prosecretaria segunda de la Unión Industrial Argentina.

A su turno, Federico Braun, presidente de S.A. importadora y exportadora de La Patagonia (supermercados La Anónima), se mostró proclive a buscar más diálogo y alcanzar consensos, pero al mismo tiempo se quejó por el agravamiento de lo que definió como uno de los problemas estructurales en la Argentina: “La competencia desleal y la evasión”.

“A mí me enferma ver que se encaran reformas y ver que no se hace nada con la evasión”, reclamó Braun.

En esa línea, explicó que los supermercados tienen dificultades frente a lo que él definió como “supermercados orientales” y detalló: “A las dos marcas más grandes de supermercados les está yendo muy mal y en cambio ver que a 15.000 supermercados chinos le fue muy bien pero que no cumplen ninguna norma y no pagan impuestos. Es difícil competir así. El gobierno nacional decidió bajar el IVA y nosotros al día siguiente bajamos el 17% y así por primera vez fuimos más barato que los chinos en muchos años. Muchos países tienen políticas de 0 IVA en alimentos”.

Sobre las perspectivas futuras, Galperin afirmó: “Todos los candidatos están hablando de acuerdos. Se hablaba de que el futuro es sin grietas. Se puede tener distintas visiones de país o de modelos económicos sin que necesariamente haya grieta, hay problemas que nos están aquejando hace décadas, como la falta de generación de empleo, la pobreza, la inflación y el déficit fiscal. Esos cuatro los tenemos que solucionar sí o sí y que van a necesitar de un consenso”.

“El problema de Argentina es que la coyuntura termina tapando el bosque y no se pueden resolver. La situación en la que estamos es muy compleja económica, política y social nos va a obligar y a sentarnos a resolver estos problemas que son realmente graves. En el resto de la región estos problemas los han solucionado”, reflexionó. 

En el mismo sentido, Castro aseguró: “Somos uno de los actores sociales del diálogo tripartito y desde la UIA presentamos 150 propuestas que se estructuran en ejes que podíamos acordar todos, como política monetaria y fiscal pensada para crecer. Desarrollo federal y pyme que tiene temas de productividad que hay que resolver y que es la que está metida en el territorio“.

Respecto de la generación de empleo, Galperin y Castro coincidieron en que la tecnificación, lejos de expulsar personas del mercado laboral, generaría más puestos.

“A pesar de que automatizamos creamos empleo porque la torta se hizo más grande”, indicó castro en referencia a su empresa, que integra la cadera de valor autopartista.

Galperin también sostuvo: “la Ley de software y la ley del conocimiento bajan las cargas laborales, bajan un 70% de los costos de generar empleos y eso es algo que argentina necesita muchísimo. Hoy tenemos seis millones de personas trabajando en el sector privado y ayer decían que más o menos hay 15 millones en la pobreza. No hay manera de que con seis millones de personas demos planes sociales a la gente que está en la pobreza. Lo que hay que generar es empleo”. 

“Y la industria del conocimiento va a generar mucho empleo. Hoy en este sector hay 1,6 millones de empleos en el sector formal y se exportan 6.500 millones de dólares. Si en los próximos 15 años sucede en la industria del conocimiento lo que sucedió en la industria del software vamos a crear muchos empleos, vamos a generar muchos miles de millones de dólares y vamos a sacar a mucha gente de la pobreza. Son empresas muy competitivas y rentables”, se esperanzó.

Pero acalró la necesidad de crear talentos y dio un ejemplo: “Las empresas del sector estamos enfocadas en capacitar a nuestros empleados y empleadas y en enviar a capacitarse en el exterior y en invertir en capacitación digital. Porque es un área donde hay pleno empleo y donde hacen falta recursos. De los 800 que contratamos este año entrevistamos a 8000 pero Argentina produce solo 6000 ingenieros por año”.

En el mismo sentido, Castro se preguntó: “¿Reformas para qué?. Si hablamos de reforma tributaria, tiene que estar pensada para agregar valor. Si no, vamos a terminar en una economía primarizada, como dijo ayer el secretario general de Sanidad, Héctor Daer”.

“El diagnóstico es de heterogeneidad en el mundo productivo, son solo el 6% de las que denominamos cóndores, porque están sobrevolando la montaña de la industria 4.0, en el tope de la cadena tecnológica. Después tenés menos de la mitad que no están haciendo absolutamente nada y tenés cerca de un 40% que ya iniciaron el proceso. A cada uno de esos lugares se necesitan políticas distintas”, explicó.  

Y concluyó: “Tenemos que trabajar por las cadenas de valor globales. El coloquio reúne una parte importante de capital nacional y capital trasnacional. Hoy no hay desarrollo posible en el mundo si no hay alianza entre esos dos capitales”.

Braun se mostró optimista respecto de la “potencialidad enorme que tiene la Argentina. Hay que crear mano de obra intensiva para crecer” aunque dijo que se vienen “momentos difíciles”.

Finalmente, Braun se refirió a la reserva energética de Vaca muerta y dijo: “Si no logramos poner en valor Vaca Muerta los argentinos tenemos que matarnos. Por favor no matemos a vaca muerta porque eso puede permitir que Argentina no tenga más las restricciones que tiene”.