En el 62° congreso de la Asociación Latinoamericana del Acero (ALACERO) que tuvo lugar el día de hoy, Paolo Rocca, CEO del Grupo Techint, afirmó que "está surgiendo" una oportnidad muy importante para el país de "entrar con fuerza" en la redefinición de la cadena de valor a nivel mundial y tener una mayor participación en ella.

"Lo que está surgiendo es una oportunidad muy importante para nuestra industria y nuestros países de entrar con fuerza en la redefinición de la cadena de valor a nivel mundial", señaló en el encuentro que se realizó de manera virtual. Y agregó: "estamos ante un desafío importante pero una oportunidad extraordinaria".

Además, hizo referencia a una serie de puntos a favor que tiene Argentina: "la ventaja desde el punto de vista de la competitividad, la situación geopolítica, la transición energética y la sustentabilidad de sus recursos", enuméró.

Por otro lado, se refirió a la situación pospandemia y dijo: "La recuperación de la actividad fue muy fuerte y generó una distorsión muy importante en la cadena de valor". En ese sentido, agregó que la situación dio cuenta de "la fragilidad de la cadena de valor extendida y la necesidad de acortar los canales y la velocidad de reacción de la cadena utilizando todos los instrumentos de la digitalización".

En otro orden, el empresario subrayó que "la confrontación entre Estados Unidos, Europa, Japón y China genera dificultades en la cadena de valor" y afirmó que "todas las compañías en el mundo se están planteando cuál es una estructura en el tiempo que tenga en cuenta la fragilidad y los riesgos de la cuestión geopolítica". 

En esa línea, indicó que "la transición energética entró con fuerza en la agenda de todas las compañías y en la cadena de distribución industrial".

Por otra parte, Rocca, quien además dirige Tenaris, Ternium y otras empresas, sostuvo que la cadena del acero es fundamental para la industria y la infraestructura porque "puede transformar la sociedad, crear empleo de valor". 

Al respecto, comparó que "Latinoamérica participa con un 30% de su industria en la cadena de valor mundial, cuando en Europa esa cifra es del 60%". Y agregó que: "La debilidad y la primarización de las economías de la región causan desigualdad y pérdida de movilidad social".