Primero la carne, ahora el maíz: la nueva grieta entre el campo y el gobierno

Los cambios permanentes en las reglas de juego en las exportaciones agroindustriales provocan incertidumbre y malestar en los productores y en la industria

     Comentarios
     Comentarios

Una resolución de la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios, emitida a comienzos de semana, volvió a descolocar al sectores agropecuario y agroindustrial. La disposición, que fue enviada a los exportadores, sostiene que a partir de ahora “sólo se aceptarán para su registro de Declaraciones Juradas de Venta al Exterior dentro del régimen especial denominado DJVE-30 establecido por el artículo 13 de la citada Resolución N° 128/19, siempre que las mismas correspondan con operaciones debidamente respaldadas con sus compras físicas y con barcos nominados con fecha estimada de arribo”.

Desde el gobierno nacional han afirmado que “las exportaciones están abiertas” y que la decisión adoptada “no tiene ninguna implicancia en los mercados de futuros porque sólo rige para la presente campaña comercial”. Y remarcaron: “Las registraciones de la campaña 2021/2022 continúan de manera convencional y ya lleva registradas DJVE por 6,12 millones de toneladas”

La medida causó sorpresa en el sector. Desde la Mesa de Enlace manifestaron su “preocupación” y aseguró que “generan confusión y desconfianza en toda la cadena”. Además, indicaron: “Burocratizar aún más el régimen de exportaciones y desalentar la producción son malas señales para un país que necesita desarrollo productivo, generación de divisas genuinas, y producir empleo y trabajo”.

La dirigencia espera que “la experiencia de la que tratamos de salir en la cadena de la carne sirva como antecedente y muestra de que cuando se producen modificaciones por decisiones inconsultas, se generan daños en toda la cadena, afectando a los productores y resquebrajando la credibilidad de nuestro país ante el mundo”.

La realidad es que la decisión oficial vuelve a causar confusión en el sector agropecuario y agroindustrial, en tiempos donde todavía resta sembrar el maíz tardío de la presente campaña. Y, los mismos productores temen que, al igual que ocurrió con la carne y el cereal, la próxima víctima del gobierno sea el trigo.

Un buen guiño a la cadena cárnica, pero falta

Según se publicó en la resolución 219/2021 publicada en el Boletín Oficial el Ministro de Agricultura y Ganadería de la Nación, Julián Domínguez, dio curso a la exportación de 140.000 toneladas de carne de vacas Categoría D y E a China, pero solo hasta el 31 de diciembre.

Además, se liberó los envíos de carne Kosher a Israel, que estaban bloqueados desde el comienzo de la suspensión de embarques.

De esta manera, la flexibilización de la restricción a la exportación de carne en principio será hasta el 31 de diciembre. La disposición precisa que “esta asignación se realizará hasta alcanzar la faena de 140.000 vacas de esta categoría. Las toneladas disponibles para exportar mensualmente no se podrán acumular en los períodos siguientes”.

Por otra parte, el artículo 3 de la resolución establece que cada establecimiento frigorífico recibirá entre 50 y hasta 100 toneladas para embarcar dependiendo de su proceso productivo.

La medida fue bien recibida por la dirigencia agropecuaria y la cadena cárnica en general. Sin embargo, todavía entienden que no hay una apertura total, teniendo en cuenta la prohibición de exportar los famosos siete cortes que deben destinarse al mercado interno.

Comentarios