Una pyme rosarina desarrolló un prototipo de equipo purificador de agua ultrapura, destinada entre otras cosas a realizar los test de PCR en los estudios para coronavirus. De esta manera, reemplazarán equipamiento actualmente importado por uno producido localmente y a mitad de precio.

Se trata de Sepal, empresa rosarina de 20 años dedicada a la fabricación y comercialización de unidades de tratamiento de agua para uso doméstico, industrial y microbiológico. “Nosotros arrancamos con agua desmineralizada para laboratorio, abarcamos la potabilización y el agua pura, pero teníamos un déficit en el agua ultrapura”, señaló Claudio Baristain, titular de la firma, a Ecos365.

Este producto es altamente utilizado por laboratorios, institutos de investigación, hospitales y sanatorios, ya que resulta clave en la biología molecular y en la industria bioquímica. Actualmente, su mayor uso está en los test PCR para detección de coronavirus. “Hoy esos equipos llegan al país provenientes de Estados Unidos, España y Alemania, y ahora nosotros comenzaremos a producirlos”, dijo.

A partir de una asistencia económica del programa provincial Innovar Santa Fe 2020, comenzaron a desarrollar un prototipo que cuenta con varias innovaciones, como una doble ósmosis, tecnología de electrodesionización y un sistema de control a distancia con dispositivos de IOT. “Esto nos permite contar un agua de muy baja conductividad, algo que no se consigue en Argentina”, indicó.

Habitualmente estos equipos cuentan con un sistema de cassette pre tratamiento que se reemplaza cada seis meses, pero su creación requiere de muy bajo mantenimiento, y habría que reemplazarlo recién a los cuatro años, algo inédito. “Ese cassette está conectado a un equipo, que cuenta con un sistema automático que no solo regula todo el aparato, sino que también nos informa de manera remota todos los valores y nos notifica si algo está fuera de lo normal y si hay que hacer algún ajuste, por lo cual nosotros podemos mandar automáticamente el service”, detalló.

El desarrollo, que llevan adelante en conjunto con expertos del INTI, permite que el cliente se despreocupe por entero del equipo, y le otorga un considerable ahorro. “Estimamos que una vez a la venta, saldrá un 50% más barato que los importados. Una de nuestras finalidades es sustituir importaciones, y una vez que ganemos escala, explorar la posibilidad de exportar”, expresó Baristain, y agregó que para eso están tejiendo una red de alianzas con representantes técnicos que puedan brindar el service en los distintos lugares a los que apuntan.

“En una primera etapa produciremos tres equipos y los colocaremos en distintos lugares para ir monitiréandolos y haciéndoles los ajustes necesarios. Una vez que esté el producto con todas las mejoras en marcha, lo lanzaremos al mercado, estimamos que en julio o agosto de 2022”, cerró.