Santafesinas trabajan en un original dispositivo para gestión menstrual con nanopartículas

Ganaron un concurso y ahora iniciarán las pruebas para crear los primeros prototipos. Las emprendedoras cuentan de qué se trata y por qué podría ser mejor que la copita menstrual

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Flux es el nombre de un equipo interdisciplinario formado por jóvenes santafesinas que apuntan a revolucionar la industria de la higiene menstrual a partir del uso de nanotecnología. Su proyecto plantea la creación de un textil funcional sustentable que pueda ser utilizado durante la menstruación y que además contenga hilos impregnados con nanopartículas por su acción bactericida y sus capacidades antimicrobianas.

"Estos nanocompuestos cumplirán una función absorbente y antibacteriana, pudiendo prevenir la generación de olores e infecciones", señaló Morena Vicente, comunicadora social y una de las integrantes de Flux. El resto del equipo está conformado por las biotecnólogas, María Laura Rodríguez y Valeria Simonutti, licenciada en Diseño Industrial, Paula Portmann, la especialista en Comercio Exterior, Virginia Rivero y la contadora pública Marcela Cozzi.

"Para tomar consciencia, en un año los residuos no reciclables por tampones y toallitas en Argentina equivalen a nueve estadios de fútbol".

Cada una sumó su expertise para poder conformar las distintas patas de esta iniciativa que apunta a consolidarse en el campo de la salud y acaba de resultar ganadora del Concurso de ideas ProyectáBio, que organiza la Universidad Nacional del Litoral (UNL), a través del Programa UNLBio de la Secretaría de Vinculación y Transferencia Tecnológica. 

"Nosotras nos conocimos en Idea-L Team, una actividad que se desarrolla en el marco de la competencia ProyectaBío en Santa Fe. Desde ese momento, comenzamos a trabajar en la idea de este dispositivo, llenamos el formulario y nos presentamos al concurso en el cual nuestro proyecto obtuvo el primer lugar ", contó Vicente y destacó que el dinero que recibirán como premio será utilizado para comenzar las pruebas con nanocompuestos con el objetivo de validar un prototipo de tela activa que sea factible de utilizarse en salud íntima.

Un desarrollo de doble impacto

En palabras de la emprendedora, la iniciativa surgió por la necesidad de dar respuestas a diversas problemáticas que afectan a la salud de las personas y del medioambiente. Si bien el formato todavía no se terminó de decidir, barajan que sea un textil en forma de toallita o bombacha, que respete al 100% el cuerpo de las mujeres y personas menstruantes y pueda ser reutilizado para evitar la acumulación de desechos.

"Pese al avance de la tecnología, todavía no hay un producto que cumpla al 100% con nuestras necesidades y que sea de industria y producción nacional".

Vicente sostuvo que el proyecto surgió debido a que los productos para gestionar la menstruación presentes en el mercado y accesibles al bolsillo producen daños en el cuerpo al exponerlo a químicos y residuos de pesticidas. También explicó que generan una gran cantidad de desechos que afectan al medioambiente: "para tomar consciencia, en un año los residuos no reciclables por tampones y toallitas en Argentina equivalen a nueve estadios de fútbol".

En este sentido, la emprendedora consideró que el proyecto plantea una alternativa que podria ser más confiable en comparación con la copita menstrual. Es que desde Flux llevaron adelante una investigación donde comprobaron que, si bien su material es biodegradable y reduce el impacto ambiental, puede generar riesgos para la salud de las personas dado que para reutilizarse debe esterilizarse y este resultado no se consigue solo hirviéndola, sino a través de un proceso mucho más complejo.

A su vez, señaló que el formato de la copita y su mala higienización favorecen la proliferación de bacterias y problemas a futuro: "es cómodo para muchas, pero su seguridad es relativa y al utilizarse desde hace poco tiempo todavía no sabemos qué riesgos puede traer a largo plazo. Pese al avance de la ciencia, todavía no hay un producto que cumpla al 100% con nuestras necesidades y que sea de industria y producción nacional".

Nanotecnología para la salud

Es innegable que la nanotecnología viene avanzando con fuerza en la provincia de Santa Fe de la mano de diferentes actores. La misma consiste en un conjunto de ciencias y técnicas que trabajan manipulando la materia a nanoescala, es decir, a nivel de sus estructuras moleculares y sus átomos ya que, al encontrarse en esas medidas extremadamente pequeñas, presentan funcionalidades únicas. Una de ellas es su capacidad de eliminar bacterias y olores, cumpliendo una función sanitizante.

En el caso de Flux, para llevar adelante su desarrollo el equipo viene siendo asesorado por una empresa que trabaja en este campo. Se trata de Nanotek, cuya área científica está alojada en el Parque Tecnológico del Litoral Centro y acaba de lanzar una línea de barbijos con partículas de nanoplata, las cuales logran detener y al mismo tiempo eliminar a los microorganismos del coronavirus, de acuerdo a los testeos realizados.

"Se interesaron por nuestra iniciativa y nos llamaron para ofrecernos su apoyo y asesoría. Estamos esperando que sea haga efectivo el fomento de ProyectaBío para iniciar las pruebas y vamos a ir impregnando distintas telas con diferentes nanocompuestos que pueden ser plata, cobre o zinc, a la par de esta empresa, contando con su ayuda a la hora de realizar las evaluaciones para determinar qué formula es la indicada", señaló la emprendedora y aseguró que pronto habrá novedades sobre el desarrollo.

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