Las empresas transportistas de carga hace casi un año que cuentan en promedio con un 10% menos de sus camioneros, con licencia por formar parte de la población de riesgo, y se les está haciendo sumamente complicado poder reemplazarlos. El problema se agravó en los últimos meses, con la reactivación económica, y está provocando complicaciones en las entregas.

“Realmente es un problema muy grave el que estamos teniendo con las licencias, porque tenemos mucho personal sin poder trabajar y no estamos encontrando choferes profesionales para sustituirlos”, manifestó Marcelo Becci, secretario general de la Asociación de Transportes de Cargas de Rosario (ATCR).

Ocurre que no cualquiera puede ponerse al frente del camión, ya que se exige una instrucción muy específica y contar con licencias especiales. “No nos llegan ni currículums y tenemos muchos camiones parados por falta de choferes”, dijo a Ecos365, y agregó que los propios trabajadores mayores de 60 están pidiendo volver a su empleo, porque el salario que perciben estando de licencia es considerablemente menor.

Tenemos mucha gente sin poder trabajar y no estamos encontrando choferes profesionales para sustituirla"

“En noviembre se venía hablando de la posibilidad de que los habiliten a aquellos sin problemas de salud, después pasó para diciembre, pero estamos a mediados de enero y no hay novedades”, señaló respecto al anuncio que se espera del Ministerio de Transporte de la Nación, y que habida cuenta de la suba de la curva de contagios, será difícil que se concrete a la brevedad.

“A ellos se suman los administrativos, mecánicos y otros empleados mayores de 60, pero los choferes son los más difíciles de reemplazar. Calculamos que en promedio cada empresa tiene problemas con el 10% de este personal por las licencias”, analizó Becci. El inconveniente para las empresas se agrava porque deben pagar doble sueldo, en caso de lograr reemplazar a quienes tienen licencia.

En 2020 los costos del transporte de carga subieron 35%, mientras que en 2019 habían aumentado 47% y en 2018 61,5%, según Fadeeac"

El Estado amortiguaba en parte la carga a través de los ATP, que se terminaron a fin de año y que desde entonces dejaron tambaleando a más de un transportista, muchos de los cuales adeuda aportes sindicales y sociales. Y es que a eso se le sumaron los fuertes aumentos registrados en combustibles, insumos, neumáticos y otros elementos cuyos valores se dispararon con la devaluación, y que encima con las restricciones a las importaciones, se está dificultado mucho conseguir.

De acuerdo al índice elaborado por la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), el incremento de costos de 2020 fue del 35%, pero hay que considerar que los transportistas estuvieron cerca de tres meses parados. “Si los contamos, el aumento habría sido mayor, pero ni siquiera podemos trasladar el 35% a los clientes y cada vez resignamos más ganancias”, apuntó. La buena noticia es que de a poco van recuperando volumen de trabajo, y ya para fin de año habían alcanzado entre un 80% y 90% de operatividad.