El aeropuerto internacional Islas Malvinas de Rosario empieza de a poco a sumar actividad luego del parate que generó la pandemia. A los destinos de cabotaje que desde hace un tiempo ya se habilitaron nuevamente, la empresa de capitales estatales sumó destinos internacionales que ahora busca ampliar.

“Lo mejor que logramos hasta ahora es tener una ruta que funciona muy bien que es Rosario - Panamá. Comenzamos en marzo con tres frecuencias semanales y en 40 días vamos a llevarlo a seis salidas semanales para terminar en agosto con un vuelo diario”, destacó en El mejor día de la semana (Radio 2), el presidente del aeropuerto, Eduardo Romagnoli.

Con respecto a los nuevos destinos que se van a sumar en el corto plazo, el funcionario anticipó que hay negociaciones avanzadas con la aerolínea Gol para recuperar los vuelos directos hacia Río de Janeiro y posiblemente también a San Pablo. “En noviembre vamos a tener estas dos rutas a Brasil”, anticipó. 

Por su parte, también reconoció que continúan con el objetivo de crear una conexión entre Rosario y Roma o Milán. Para esto ya iniciaron gestiones con el embajador de Italia en Argentina para que la empresa Ita Airways tenga en consideración el aeropuerto local. “Lo que hicimos fue una apuesta estratégica que pasa por la gestión. Estamos todos apuntando a que tal vez en un año, dos, cinco o diez, Rosario tenga una ruta directa a Italia”, aclaró.


¿Rosario - Madrid sin escalas?

Consultado sobre la posibilidad de que aparezca un servicio que conecte la ciudad con la capital española, Romagnoli reconoció que hay conversaciones en curso. “El marco es muy alentador, pero hace falta mucho trabajo para poder lograrlo. Hace un año que estamos hablando periódicamente con la compañía Air Europ. para intentar hacer un vuelo directo o uno por código compartido desde Rosario a Madrid”, detalló.

Con respecto a lo que representaría tener un vuelo compartido, el presidente del Islas Malvinas explicó que se podría coordinar una conexión Rosario - Asunción con una compañía aérea y desde allí poder conectar con Air Europa para llegar a Barajas.

“Los códigos compartidos suponen una reducción en los costos”, remarcó. Además, explicó que la chance real de comenzar a viajar al viejo continente tiene que ver con “los cálculos econométricos en los que se proyecta la potencialidad que tiene el aeropuerto en la región”.

El Aeropuerto Internacional de Rosario está en condiciones de asistir a unas 6 millones de personas de la zona del centro y sur de Santa Fe, la provincia de Entre Ríos, sudeste de Córdoba y norte de Buenos Aires. Son 6 millones de habitantes con posibilidades de viajar”, insistió.

“Cuando hacemos estos cálculos, a cualquier compañía le interesa pensar en una población que tiene un porcentaje muy alto de personas en condiciones de viajar y se interesan. Conversamos con miras puestas para el 2023, pero nunca perdamos de vista que la decisión final es eminentemente comercial y económica que tiene que tomar la compañía aérea", concluyó.