Una tormenta imprevista. Aunque el pronóstico no advierte sobre lluvias, la madrugada sorprendió con truenos y chaparrones en distintas partes de la ciudad. En medio de tanta inestabilidad, el calor es lo único seguro.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) reflejaba la tormenta con “un nublado con tormenta débil”. El pronóstico no contempla precipitaciones a pesar de la tormenta que tenía lugar en la primera mañana. El cielo apretado de nubarrones sacudía relámpagos.

El vaivén climático sólo tiene un punto seguro hoy: el calor. Desde temprano, se sentía el aire húmedo y pesado. La temperatura máxima prevista es de 33 grados.