El alerta por tormentas fuertes ya no está vigente para el sur santafesino. Sin embargo, en Rosario se mantienen firmes las posibilidades de lluvias durante todo el día. 

La madrugada fue una sucesión de chaparrones y truenos que despertaron a muchos. Temprano, la calle estaba cargada de charcos rebalsados y el aire apenas había refrescado. Arriba, el cielo parecía una chapa plateada. Con el correr de las horas, el aire se hizo más pesado y caliente y la lluvia menos frecuente. 

Pero, el pronóstico adelanta que lloverá todo el día. Las tormentas irán y vendrán sacudidas por el viento del sudeste. El termómetro es bien de verano. Se espera que llegue a los 32 grados de máxima.