El gobierno nacional oficializó este viernes el aumento salarial que se otorgará a los trabajadores del sector privado.

El ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni, dijo en conferencia de prensa que se trata de “una asignación fija remunerativa de 4.000 mil pesos en total que se pagará en dos veces: 3.000 pesos en enero y 1.000 pesos en enero”.

No es un bono. Es un aumento que queda incorporado a cuenta de lo que negocien las convenciones colectivas en las paritarias de 2020”, aclaró el funcionario nacional e indicó que se trata de una “cifra fija para todas las escalas y todas las categorías”.

Moroni también señaló que se trata de un “piso” para los sectores asalariados que quedaron más postergados.

Agregó que con la suma, “1.300.000 trabajadores recuperarán el poder adquisitivo perdido en 2019”.

“En 10 de los 20 convenios colectivos de mayor cobertura, es decir, de los que mayor cantidad de personal tienen, la suma fija permite recuperar todo el poder adquisitivo perdido en 2019. Estos son: construcción, entidades deportivas, estaciones de servicios, encargados de edificios de renta, alimentación, metalúrgicos, seguridad, sanidad, pasteleros y cuero”, detalló Moroni.

Además, consideró que “tendrá un efecto dinamizador de la demanda, porque se incrementará la masa salarial en 20.000 millones de pesos”.

Por otra parte, el ministro de Trabajo de la Nación informó que la semana próxima se comunicará “una medida de alcances similares” para los empleados públicos nacionales. Dijo que ese anuncio se vio demorado “por la complejidad de las escalas salariales” del sector.

La medida se terminó de definir durante una reunión realizada este viernes a la mañana entre el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y los ministros de Trabajo, Claudio Moroni, y de Economía, Martín Guzmán.

El titular de la jefatura de Gabinete adelantó en conferencia de prensa que lo que se decidió otorgar "es un aumento de suma fija y a cuenta de los próximos aumentos que tengan las paritarias" para los empleados privados y estatales.

El último jueves, Alberto Fernández les pidió a los gremios que no hagan "pedidos desmedidos", y planteó que hay que ser "cuidadosos" porque los aumentos salariares "repercuten sobre el resultado de la economía".

Cafiero, en tanto, aclaró que se busca que las "empresas, pymes y comercios puedan pagar" el aumento.