Tras un nuevo ataque ruso en las afueras Kiev, la capital de Ucrania, el Ministerio de Defensa británico informó este lunes que Reino Unido enviará sus primeros misiles de largo alcance al país que hace 100 días fue invadido por orden de Vladimir Putin.

Londres avanzará con la maniobra a pesar de la advertencia del presidente de Rusia, quien afirmó que atacaría nuevos blancos en caso de que Occidente continuara enviando armas a Ucrania.

El titular de Defensa, Ben Wallace, indicó que su país enviará una cantidad no especificada de lanzadores M270 capaces de disparar cohetes guiados con precisión hasta 80 kilómetros, un alcance mayor que cualquier tecnología de misiles actualmente en uso en la guerra.

"El Reino Unido apoya a Ucrania en esta lucha y está asumiendo un papel de liderazgo en el suministro a sus heroicas fuerzas de las armas vitales que necesitan para defender a su país de una invasión no provocada", dijo Wallace en un comunicado.

También sostuvo: "Si la comunidad internacional continúa su apoyo, creo que Ucrania puede ganar. A medida que cambian las tácticas de Rusia, también debe cambiar nuestro apoyo a Ucrania".

Kiev no había sufrido ataques aéreos rusos desde la visita del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres.

Además de confirmar el envío de los lanza misiles de largo alcance, una decisión que según el propio Ministerio fue estrechamente coordinada con Estados Unidos, Wallace agregó que las fuerzas ucranianas serán entrenadas en el Reino Unido para usar el equipo.

Washington y Londres confían en que las entregas ayuden a Ucrania a cambiar la tendencia de la guerra en la región oriental del Donbás, que Rusia parece decidida a capturar por completo.

Fue luego de que Washington anunciara el envío de nuevos misiles que Putin había prometido atacar nuevos blancos.

Nuevos ataques en Kiev

El domingo por la madrugada, Kiev fue blanco de los primeros ataques rusos en la capital desde el 28 de abril, mientras que las fuerzas de Moscú también han mantenido una presión constante a través de la artillería y los ataques aéreos en la región del Donbás.

El Estado Mayor ruso dijo que sus fuerzas habían disparado cinco misiles de crucero X-22 desde el Mar Caspio hacia Kiev y que uno había sido destruido por defensas antiaéreas. Otros cuatro misiles alcanzaron "instalaciones de infraestructura'', aunque Ucrania dijo que no se registraron víctimas mortales.