Jacinto Arauz es un pequeño pueblo ubicado en la provincia de La Pampa, a 200 kilómetros de la capital provincial, en donde viven tan solo 2.434 personas. Y entre la población de esta localidad se encuentra Irma Rick o "I. R.". como se conoció primero a la protagonista de un suceso paranormal muy reciente que conmocionó a todos sus vecinos y llegó a capturar el interés de expertos de Estados Unidos, Rusia y España.

Todo comenzó el pasado 16 de noviembre, cuando el esposo de la mujer reportó su depasarición luego de estar varias horas sin tener noticias suyas.

La policía de Jacinto Arauz desplegó un operativo que no dio resultados, pero finalmente la mujer apareció a 60 kilómetros de su casa un día después, sin poder hablar.

Según consignó el portal La Unión en diálogo con expertos, mientras I. R. estaba desaparecida, la familia recibía llamadas telefónicas desde su celular, pero en lugar de hablar con ella "solo escuchaban un zumbido o viento".

El fiscal a cargo del caso descartó "que haya existido alguna situación de violencia de género".

Los dispositivos de rastreo e incluso los celulares de las autoridades fallaban y la búsqueda parecía no tener un buen final, hasta que la mujer apareció.

"Veía luces y todo blanco"

Los motivos de su misteriosa desaparición aún no están claros, pero en el pueblo comenzaron a circular versiones de que la mujer habría sido abducida por alienígenas. Días después, ella misma habló con la prensa y brindó su testimonio sobre lo sucedido.

En diálogo con Crónica TV, la vecina del pueblo pampeano Jacinto Arauz relató que estaba en su casa, sentada en la comodidad de su living, cuando comenzó a advertir situaciones extrañas. "Me levanté, tomé dos o tres mates, me puse a jugar con el teléfono y me empezó a hacer rayas, como interferencias. Comencé a escuchar como un zumbido de viento fuerte en el teléfono y salí a ver pensando que mi marido se había olvidado de algo", dijo. 

La mujer describió así su último recuerdo, ya que a partir de allí su memoria quedó en blanco hasta que recuperó la consciencia un día después. "Solo escuché el viento como fuertísimo. No sé si era de noche o de día. Atinaba a abrir los ojos y veía luces y todo blanco, como si fuera nieve. Esa misma claridad no me dejaba abrir los ojos", aseguró.

La mujer relató lo que le ocurrió. (Captura Televisión)

Irma contó que no sabe cuánto tiempo estuvo "sentada en la calle con las piernas extendidas" y "los brazos arriba de las piernas", ni tampoco cuántas horas transcurrieron entre que perdió el conocimiento y apareció en el campo.

"Cuando me levanté, tenía el teléfono prendido. Estuve dando vueltas hasta que empecé a reaccionar. Miré el teléfono y eran las 5.30 de la mañana", relató y agregó que lo primero que hizo fue comunicarse con sus hijos, pero que "no podía hablar".

"Le empecé a escribir a los chicos, ellos me hacían videollamada pero yo lo único que hacía era mover las manos", dijo.

Siempre de acuerdo a su relato, recién pudo recuperar el habla seis horas después de haber sido encontrada y, según le contaron, la hallaron "muy sucia y tenía olor". También remarcó que es imposible que ella haya caminado esos 60 kilómetros. "Llego a la tranquera y me canso", manifestó.

Por último, indicó que tiene un corte ya cicatrizado en la cabeza que no sabe cómo se produjo. "Tengo algo que me han hecho en la cabeza. ¿Con qué me voy a hacer eso? Me llevaron a General Acha, me hicieron una tomografía y me salió todo perfecto", concluyó.