Un expolicía armado con una pistola y cuchillos desató una verdadera masacre en una jardín de infantes de Tailandia. Mató a 24 niños y 11 adultos en un ataque que comenzó en la guardería y continuó en su propia casa, donde asesinó a su familia antes de suicidarse. Fotos y videos publicados en Internet mostraron el piso de un aula de la guardería manchado de sangre y colchonetas esparcidas por todas partes, así como a familiares de los chicos llorando abrazados y desesperados a las afueras del lugar.

Según informó la cadena internacional BBC, autoridades identificaron al agresor, Panya Khamrab, como un exoficial de policía de 34 años y dijeron que ingresó al centro de cuidado infantil después del mediodía en la ciudad de Nongbua Lamphu, en el noreste de Tailandia. 


En su escape en auto, el expolicía mató a un niño y ocho adultos más a los tiros o atropellándolos. Luego, al llegar a su casa, asesinó a su esposa y a su hijo.

"Con respecto a este horrible incidente (...) me gustaría expresar mis más profundas condolencias y dolor a las familias de los muertos y heridos", escribió el primer ministro en su página de Facebook, Prayut Chan-O-Cha.

Las muertes relacionadas con armas de fuego en Tailandia son mucho más bajas que en países como Estados Unidos y Brasil, pero más altas que en países como Japón y Singapur que tienen leyes estrictas de control de armas.

Este folleto de la página de Facebook de la Oficina Central de Investigación de Tailandia muestra una foto del ex policía Panya Khamrab, quien mató al menos a 30 personas en un tiroteo masivo

La tasa de muertes relacionadas con armas de fuego en 2019 fue de aproximadamente 4 por cada 100.000, en comparación con aproximadamente 11 por 100.000 en Estados Unidos y casi 23 por 100.000 en Brasil.

El mes pasado, un empleado le disparó a sus compañeros de trabajo en la Escuela de Guerra del Ejército de Tailandia en Bangkok, matando a dos e hiriendo a otro antes de que lo arrestaran.

La gente reunida afuera de la guardería/EFE

El peor tiroteo masivo anterior del país fue protagonizado por un soldado que abrió fuego en un centro comercial y sus alrededores en la ciudad nororiental de Nakhon Ratchasima en 2020, donde mató a 29 personas y mantuvo a raya a las fuerzas de seguridad durante unas 16 horas antes de que finalmente lo mataran.