Organizado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación tuvo lugar el conversatorio destinado a presentar los datos del último informe de la Encuesta sobre Investigación y Desarrollo (I+D) del Sector Empresario Argentino (ESID).

El encuentro contó con la presencia del ministro Roberto Salvarezza, quien destacó el compromiso de su gestión para acoplar ciencia y tecnología con producción. Remarcó que faltan investigadores al enfatizar la importancia de conectar el sistema científico-tecnológico con el sector productivo.

La charla comenzó con la presentación de Gustavo Arber, responsable de la Dirección Nacional de Información Científica quien destacó que el informe busca poner en valor estadísticas con vistas a generar un diálogo entre los sectores público y privado, analizando el rol del sector productivo en el desarrollo de las investigaciones en el país así como el abordaje conjunto de los desafíos planteados.

Seguidamente, el subsecretario de Estudios y Prospectiva, Eduardo Mallo, explicó las características generales del informe, indicando que es el resultado de un trabajo de diez años con un universo de 4000 empresas, si bien cada año se trabaja con unas 2000 aproximadamente. Las dimensiones analizadas fueron tres:

1. Participación empresaria respecto de niveles de inversión

2. Distribución de la participación por tipo de empresa (pequeña, mediana, grande, nacional, multinacional)

3. Recursos humanos en el sector privado.

Mallo describió el escenario general indicando que los niveles de inversión del sector privado en I+D son bajos, incluso más que en países de la misma región.  Asimismo, las empresas que representan el 84 % de la inversión son pequeñas y medianas, de capitales nacionales. La participación de recursos humanos altamente calificados también es bajo y la situación se hace más compleja al introducir la variable género.

En base a este escenario, surgen preguntas que apuntan a la generación de un diálogo para mejorar la inversión privada así como a lograr una mejor integración de los investigadores en las empresas privadas.

 

Metodología

Gustavo Arber tuvo a su cargo explicar la manera en que se obtienen las estadísticas e indicadores que conforman la encuesta. El primer informe se realizó en el año 2014 y junto con los realizados posteriormente permiten tener datos de una serie histórica entre los años 2009 y 2019. Las 2000 empresas encuestadas anualmente representan a distintos sectores (industrial, servicios, primario),  tamaños (desde micro a grandes empresas) y origen de capitales (nacionales y multinacionales).

La presente encuesta junto con la Encuesta Anual de Actividades Científicas y Tecnológicas, constituyen las dos fuentes de información para conocer más sobre el tema.

Las 2000 empresas que conforman el panel surgen de información sobre organizaciones que realizan actividades de I+D. Se complementan, además, con datos de otras que están en condiciones de llevar adelante actividades de I+D en el país (empresas potenciales). No son una muestra aleatoria sino basada en selección de casos.

 

Análisis de datos

Manuel Wainfeld, responsable de la ESID, analizó los datos obtenidos como resultado de la encuesta 2019, resaltando la necesidad de que investigadores, empresas y decisores políticos se adueñen de estos resultados para definir proyectos y estrategias.

(Ver gráfico 1 aquí).

Durante ese año se identificaron 1001 empresas que realizan actividades de I+D en la Argentina, con una inversión de $ 35.973 millones de pesos y 16.977 personas dedicadas al tema.

Los tres ejes de análisis aplicados para el análisis durante la charla fueron:

1. Aporte del sector empresario a la I+D en la Argentina

2. Concentración de la inversión y los recursos humanos

3. Participación de mujeres en la I+D de las empresas

A continuación un resumen de los resultados más destacados para los tres ejes.

 

Analizando los tres ejes

1. Aporte empresarial a la I+D en la Argentina

Al analizar recursos financieros en I+D la encuesta 2019 indica que el aporte de tres sectores se distribuye de la siguiente manera (considerando 1001 empresas):

Organismos Públicos de Ciencia: 39,1 %

Empresas: 36.1 %

Universidades Públicas: 22,3 %

Por otra parte, los RR.HH. se distribuyen de la siguiente manera:

UU.PP., CONICET y otros organismos de ciencia: 78 %

Empresas: 14 %

Universidades Privadas: 7 %

(Ver gráfico 2 aquí).

De acuerdo a los datos presentados, la participación empresarial es acotada. Por un lado el aporte del sector empresario (tanto en inversión como en RR.HH.) es bajo comparado con el sector público y también al relacionarlo con otros países (del globo y de la región).

Por ejemplo: a nivel global el sector empresario argentino se ubica en el puesto número 12, con una inversión en I+D del 0,16 % respecto del PBI. Este valor se ha mantenido constante con un leve incremento en los últimos años. Por otra parte, al considerar los investigadores que trabajan en el sector privado la Argentina ocupa el puesto 14 con un 9,7 %.

Al considerar el período 2015-2019, el aporte del sector empresario creció significativamente, pasando de un 22,5 % (2015) a un 36,1 % (2019). Esto contrasta con una caída del 41 % para el aporte del sector público en igual período.

El crecimiento del aporte privado a la I+D en el período 2015-2019 en un contexto adverso puede explicarse por una concentración de la I+D empresarial. Esto significa que no todas sino un subsector limitado de las 1001 empresas pudo crecer en estas condiciones particulares.

2. Concentración de la inversión y los recursos humanos

Las actividades de I+D en las empresas se concentran en un conjunto muy acotado de las mismas, un fenómeno que también se observa en otros países. Solamente 100 empresas concentran el 80 % de la inversión I+D que se hace en el país. A su vez, las 10 empresas que más invierten concentran el 40 % de la inversión. Por eso al hablar del crecimiento en la inversión empresarial en el período 2015-2019 se está hablando más de este subsector.

Origen del capital

La gran mayoría de las empresas que hacen I+D en la Argentina son nacionales (841 de las 1001 encuestadas). Al analizar la participación porcentual, casi el 60 % de los fondos provienen de empresas multinacionales. Vale la pena destacar la participación de las empresas públicas estatales (15 de las 1001), 3 de las cuales se encuentran entre las 50 que más invierten además de ser más permeables a la incorporación de RR.HH. altamente calificados con mayor proporción de doctores y másters comparado con empresas nacionales y multinacionales.

(Ver gráfico 3 aquí).

Las 10 firmas que más invierten (mencionadas en el punto anterior) tienen participación mayoritaria de capitales extranjeros.

Tamaño de la empresa

La mayoría de las empresas que hacen I+D en la Argentina son empresas pequeñas y medianas: 763 de las 1001 empresas analizadas. Incluyen empresas de base tecnológica, startups (empresas emergentes), empresas vinculadas al CONICET y las Universidades Públicas. También concentran el 42 % de los RR.HH.

(Ver gráfico 4 aquí).

Al analizar el aporte en términos de inversión, el aporte de las pymes se desdibuja como indica el gráfico.

Resumiendo: el 76 % de las empresas que hacen I+D son empresas pequeñas y medianas, concentrando el 41 % de los RR.HH. y representan sólo el 18 % de la inversión. Asimismo, las pymes dedican una mayor proporción de sus empleados así como una mayor proporción de sus recursos a las actividades de I+D comparadas con las empresas grandes.

También incorporan más doctorados (156 vs. 69). Debemos tener en cuenta que el 80 % de las empresas que hacen I+D en la Argentina no tienen ningún doctor, un punto que debe ser analizado.

Concentración I+D por sector

La I+D se concentra en un conjunto limitado de sectores, algo que no es característico solo de la Argentina. Los sectores que traccionan las actividades de I+D en nuestro país son el farmacéutico (33 %) , el de servicios I+D (20 %) y el de software y servicios informáticos (17 %) totalizando un 70 %.

(Ver gráfico 5 aquí).

El restante 30 % está integrado por unos 15 sectores que incluyen a semilleras, sector automotriz, alimentos y bebidas, etc.

Párrafo aparte merece el subsector dedicado a la investigación clínica (ensayos clínicos), constituído por algunas empresas farmacéuticas junto con empresas que realizan servicios de I+D, el cual es el que más ha crecido en el período 2015-2019. La investigación clínica representa más de un tercio de toda la investigación que se hace en el país. Es muy posible que este rol protagónico se vea intensificado a raíz de la pandemia cuando se presenten los próximos resultados.

3. Participación de mujeres en la I+D de las empresas

La presencia de mujeres en las actividades de I+D tienen un cierto equilibrio al analizar entidades privadas sin fines de lucro, organismos públicos y universidades (públicas y privadas), incluso con una diferencia a favor de las mujeres. Esta tendencia se modifica en el sector empresario con un 69 % de varones frente a un 31 % de mujeres, algo que no ha mostrado cambios significativos en los últimos años.

(Ver gráfico 6 aquí).

La disparidad de género se verifica en otros dos indicadores: rol de las mujeres (con una participación femenina que desciende a medida que aumenta la jerarquía) y nivel educativo (el cual es más alto para las mujeres que para los varones en las empresas), indicando mayores exigencias para las mujeres.

La baja participación femenina es generalizada en todos los sectores y por debajo del 50 %, siendo el sector del software uno donde esta observación es más marcada, con menos del 20 % del total del personal. La única excepción la representa el sector farmacéutico, en particular el de ensayos clínicos, donde las mujeres son tradicionalmente mayoría.

La charla contó con la presencia de Nadia Luna como moderadora de un panel representado por Vicente Campenni  (gerente general del INVAP), Andrea Mendoza Bertelli (Jefa de Investigación y Desarrollo, Biomakers), Esteban Corley (director de mABxcience), Diego Hurtado (secretario de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación) y Daniel Schteingart (director del Centro de Estudios para la Producción, ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación) quienes debatieron sobre los datos presentados así como sobre las perspectivas futuras.

La presentación puede verse en mi canal de YouTube https://youtu.be/RHVkhVMJIRc

Encuesta 2019 aquí

Informe 2021 aquí.

 

Claudio Pairoba es bioquímico, farmacéutico y doctor por la Universidad Nacional de Rosario. Master en Análisis de Medios de Comunicación y Especialista en Comunicación Ambiental. Miembro de la Escuela de Comunicación Estratégica de Rosario y la Red Argentina de Periodismo Científico. Acreditado con la American Association for the Advancement of Science (Science) y la revista Nature.

 

Nota relacionada

El aporte del sector empresario a la I+D argentina

https://www.argentina.gob.ar/noticias/el-aporte-del-sector-empresario-la-id-argentina