La familia de Teresa Silvana Leguizamón sigue reclamando que se haga justicia por la muerte de la mujer de Lanús, que falleció el 30 de enero pasado a causa de hemorragias internas y un derrame cerebral que fue provocado por múltiples golpes que recibió días antes de morir. 

"Mi cuñado me pegó con un palo en la cabeza", cuentan que Teresa le dijo a la médica que la atendía sus hermanas. 

Según contó Mónica Leguizamón, una de las cinco hermanas de la víctima, el 28 de enero el esposo de Teresa se comunicó con Evangelina, otra de sus hermanas. 

"Le dijo que ella se había descompensado producto del estrés que le causó haberse enterado que uno de sus cuñados había tenido un accidente en moto. Algo que nada que ver. La cuestión es que minimizó completamente la situación por lo que Evangelina decidió llamar a Nancy (otra hermana)", relató. 

Quien se topó con una situación horrible fue Alex, el mayor de los tres hijos de Teresa, que también era madre de dos hijas de 16 y 2 años. 

Al día siguiente de lo relatado por Mónica, el joven de 21 años fue hasta la casa de su madre, a quien encontró "inconsciente agonizando en la cama con su beba al costado y separada por una silla".

"El marido no estaba, se había ido a trabajar y aparentemente la había bañado antes de irse. Alex inmediatamente llamó a la ambulancia y se la llevaron al hospital Narciso López", relata Mónica.

Los familiares de Teresa reclaman por justicia. 

En la guardia la interrogaron y allí fue donde, "en un estado de semi inconsciencia", dice Mónica, Teresa contó que le habían pegado un palazo en la cabeza.

Dos días más tarde, y sin salir del coma farmacológico al que la habían inducido, la mujer falleció y el propio hospital hizo la denuncia ante la evidencia de que podía tratarse de un femicidio. 

"Nos acercamos a la Comisaría 10ª y nos dijeron que volviéramos el lunes 1º de febrero porque en fin de semana no trabajaban. Fuimos ese día y no nos quisieron tomar la denuncia supuestamente porque el hospital ya la había hecho y tenían que mandar un médico perito para buscar la historia clínica ", recordó Mónica. 

El martes volvieron a la Comisaría y al día siguiente fueron hasta los tribunales de Avellaneda-Lanús. "El jueves trasladaron el cuerpo a la morgue de Lomas y finalmente confirmaron el causal de su muerte: golpes".

Sobre el avance del caso, Mónica contó que "es todo muy lento", ya que a pesar de que Teresa mencionó a un cuñado todavía no citaron a nadie a declarar. 

"Ya hicieron todas las averiguaciones correspondientes pero esto no avanza. El femicidio fue el 30 de enero, ya estamos terminando febrero y todavía no movieron los ojitos para leer el caso de mi hermana", lamentó la mujer.

En tanto, afirmó que todavía no saben cuál de los cuñados pudo haber estado involucrado en el femicidio, "pero el marido fue cómplice".

"Supuestamente él llegó de trabajar el 28, la vio que estaba tirada en el piso, la levantó, la bañó y la acostó en la cama toda golpeada con hemorragias en varias partes del cuerpo. Después dice haber llamado al SAME que llegó a su casa pero no se la llevaron porque 'era un mareo y nada más', pero por lo que vi en la foto de la morgue hasta el más tonto se da cuenta de que algo le había pasado a mi hermana", dijo la hermana de la víctima.

La causa está en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 del Departamento Judicial Avellaneda-Lanús, especializada en delitos contra la integridad sexual y violencia familiar y de género, a cargo de la fiscal María Soledad Garibaldi.

Según la investigación Judicial Teresa era víctima de violencia de género desde hace mucho tiempo, ya que su marido la controlaba a tal punto que no le permitía la comunicación con sus propios familiares.

"Solo queremos que se haga la detención inmediata de los culpables y que sea un juicio con todo el peso de la ley", concluyó Mónica.