La ministra de Mujer, Familia y Derechos Humanos de Brasil, Damares Alves, levantó polémica y repudio al asegurar que “las niñas pobres son violadas porque acostumbran andar sin bombachas”. Es la misma funcionaria ultraconservadora del presidente Jair Bolsonaro que al asumir su cargo dijo que “los niños deben vestir de azul y las niñas de rosa”.

Dalmara Alves habló en la presentación de un programa para combatir la explotación sexual y la violencia contra los niños, adolescentes, jóvenes, mujeres y ancianos en la isla de Marajó.

Al referirse al alto índice de violaciones, aseguró: “Los expertos nos dijeron que las niñas son abusadas allí porque no tienen bombachas, no las usan porque son pobres”.

Luego señaló que su ministerio había recabado muchas donaciones de ropa interior para enviar a esa región y destacó que la mejor manera de combatir el crimen sería “llevar a ese lugar fábricas de bombachas, para generar empleo y producir las piezas a un precio más barato”.

Al ser nombrada en el cargo, la misma ministra había anunciado una nueva era en la que “los niños visten de azul y las niñas de rosa”.

"Especialistas nos dijeron que las niñas de allá son violadas porque no tienen calzones, la niñas no usan calzones porque son pobres", señaló Alves según un cable de la agencia ANSA.

Alves dijo que en Tapajós es habitual que "las niñas sean entregadas a cambio de alimentos o por diesel para abastecer sus embarcaciones".

Y, agregó que el gobierno estimulará la creación de microemprendimientos para aumentar la "renta de las familias".