Rocío Belén Martínez, conocida por sus amigos como “Ropi”, es una artesana de 23 años, oriunda de Rosario, detenida actualmente en Brasil por haber herido, en un acto que aseguran de autodefensa, de un policía militar que no se identificó como tal. Sus familiares y amigos se manifestaron esta mañana frente a los Tribunales provinciales para pedir la intervención urgente del Estado argentino porque acusaron también irregularidades en su detención. 

Maricel es la mamá de Ropi y este mediodía, en contacto con el programa De 12 a 14 (El Tres), contó las circunstancias de su arresto en Puerto de Gallinas: dijo que su hija se defendió con el cuchillo que usa para su trabajo de artesana de un hombre que intentó atacarla en una casa abandonada conocida como "La casa del gobernador", a la que había ido a refugiarse de la lluvia junto con otros turistas.

Maricel, la mamá de Ropi. (Foto: Alan Monzón / Rosario3)

Esto fue, precisó, hace tres semanas. El hombre, continuó, resultó ser un policía militar que no se identificó como tal y cuyas heridas no fueron graves finalmente. 

"Ella se quedó durmiendo, debajo de ese techo, junto a sus mochilas hasta que un hombre llegó a despertarla de forma violenta, sin identificarse ni mediar palabras previamente, dándole patadas en todo el cuerpo",  completa el relato el texto que sus amigos y familiares difundieron por redes sociales para convocar a la manifestación de este miércoles. 

"La mandaron directamente a un penal. Le exigimos al Estado argentino que intervenga y que garantice su integridad física", dijo una amiga en la manifestación.  

Los familiares y amigos denuncian irregularidades en la detención: los únicos testigos fueron dos efectivos de seguridad, la joven fue trasladada al Penal Colonia Femenina del Bom Pastor, en Recife, capital de Pernambuco, a unos 300 kilómetros del lugar del hecho, no recibió atención médica por las lesiones que había recibido en el ataque y además, su detención como ciudadana argentina en ningún momento desde el 11 de mayo fue comunicada por las autoridades brasileñas al Consulado argentino. También aseguraron que la hicieron declarar sin la presencia de un abogado estatal y sin traductores presentes. 

La familia de Rocío no tiene forma de acercarse a Brasil para acortar las distancias y seguir de cerca la detención de la joven. Por eso abrieron una cuenta para costear los honorarios de la defensa y estadía de Ropi en el país vecino.