Tras la detección de un caracol gigante africano "Lissachatina fulica" el pasado 23 de junio en el condado estadounidense de Pasco, en el oeste de Florida, Estados Unidos, el Departamento de Agricultura de ese estado declaró una cuarentena en la zona donde ocurrió el avistamiento, con el objetivo de prevenir su propagación.

Las autoridades instaron a la población a no tocar directamente el molusco sin contar con los medios de protección adecuados, debido a que es un portador del gusano pulmonar de la rata, lo que representa un peligro para salud.

Según el departamento, esta especie de caracol es considerada como una de las más dañinas del mundo, pues representa un grave peligro para la salud al ser portador del gusano pulmonar de la rata, un parásito que puede causar meningitis en los seres humanos.

Ante estos argumentos, el organismo instó a la población a evitar tocar el molusco sin los medios de protección adecuados. El Departamento de Agricultura de Florida anunció que, como parte de las medidas para erradicar la plaga en el área, se aplicará un pesticida a base de metaldehído que está aprobado para uso residencial.

Asimismo, indicaron que era ilegal mover, sin previa autorización de las autoridades, tanto al caracol como otros elementos como plantas, tierra, desechos de jardín, escombros y materiales de construcción dentro de la zona de cuarentena.

Un dato no menor es que los caracoles pueden poner más de 1.200 huevos en un año. De acuerdo con el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal de EE.UU., la especie "Lissachatina fulica" se reproduce de forma acelerada, dado que produce alrededor de 1.200 huevos al año.

Anteriormente, la plaga de caracol gigante africano ya fue erradicada en dos ocasiones en el estado de Florida. La primera fue en 1975 después de que se detectara el molusco en 1969, y la más reciente tuvo lugar en 2021, cuando en 2011 se determinó su presencia en el condado de Miami-Dade, según publicó RT.