La diputada nacional por Santa Fe, Lucila Lehmann se refirió a la situación de violencia e inseguridad que vive l. provincia e insistió en definirla como un narcoestado. Según aseveró, en la actualidad el crimen organizado tiene una matriz enquistada con connivencia política, policial y judicial.

“Nuestra provincia está en un momento muy grave, hay más de un muerto por día y no vemos que haya acciones profundas de una política para ir contra el crimen organizado”, aseveró en Radiópolis (Radio 2), la legisladora santafesina.

Con respecto al término narcoestado, Lehmann lo utilizó durante la reunión que mantuvo con la comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados de Santa Fe por la denuncia que había presentado en su momento contra el por entonces ministro de Seguridad de la provincia, Marcelo Sain.

“Cuando uno observa hacia atrás y ve que ahora hay un senador investigado por lavado de dinero y juego clandestino que se esconde en sus fueros como impunidad y todo un Senado lo protege y avala. Cuando uno ve que tenemos un Ministerio Público de la Acusación que no muestra ser totalmente independiente de los poderes, nuestra provincia está en un momento muy grave”, insistió.

Además, la diputada recordó también cuando balearon la casa del ex gobernador, Antonio Bonfatti y “después levantó la acusación contra su agresor” y el asesinado del narco Medina “donde un ex ministro fue a retirar evidencias y todo quedó en la nada, nunca se resolvió”.

“Desde hace unos años que venimos con el narcotráfico, el crimen organizado y la delincuencia aumentando considerablemente, hoy no hay un pueblito donde no haya narcotráfico o este tipo de flagelos. Cuando uno observa el mapa, realmente es escalofriante y me animo a decir que Santa Fe hoy es un narcoestado porque tiene la política, la policía y las mafias cada vez más afianzada entre ellas”, remarcó la legisladora.

Con respecto a la decisión de desistir en el pedido de juicio político a Saín, Lehman explicó que, al haber renunciado, ya no tenía sentido avanzar en el tema. “Cuando nosotros iniciamos esto, nos dimos cuenta que hubo muchos políticos que se bañaron en agua bendita e hicieron leña del árbol caído “, lamentó.