Un hombre de la localidad de East Meadow en Long Island, Nueva York, Estados Unidos, que vivió en una casa de tres dormitorios sin pagar su hipoteca por más de 20 años, finalmente podría ser desalojado del inmueble. Un juez del condado de Nassau dictaminó que Guramrit Hanspal es un okupa ilegal y no un arrendatario, por lo cual no puede gozar de ciertas protecciones que impedían a los propietarios del edificio echarlo de la vivienda.

Hanspal, de 52 años, compró la casa por 290.000 dólares en 1998 y solo hizo un desembolso de las cuotas de la hipoteca, de 1.602,37 dólares. Desde entonces no ha pagado nada más. A lo largo de los años, tres propietarios diferentes han intentado expulsar al hombre, desde que la firma Washington Mutual embargó el inmueble en 2000, pero el individuo aprovechó vacíos legales para defenderse hábilmente ante las instancias judiciales y continuar viviendo en la propiedad prácticamente gratis, evitando su expulsión.

Su último movimiento legal para quedarse en la casa fue aprovechar las protecciones gubernamentales contra el desalojo introducidas por la pandemia del covid-19 para ayudar a las personas que experimentaban dificultades financieras, pero el juez William Hohauser consideró que Hanspal no puede utilizarlas en su defensa, porque ocupa la vivienda ilegalmente.

En su veredicto, Hohauser dictaminó que las protecciones vigentes relacionadas con el covid-19 "se aplicarían a los arrendatarios, pero no a aquellos que no tienen ninguna obligación financiera", recogió sus palabras New York Post.

Asimismo, las personas que permanecen en una vivienda ilegalmente a pesar de una ejecución hipotecaria, cuando el prestamista recupera el inmueble debido al impago por parte del deudor, podrían considerarse "ocupantes precarios, o incluso directamente okupas", concluyó el magistrado.

Si la decisión judicial se mantiene en vigor y la defensa de Hanspal no consigue apelarla, el hombre se quedará sin su techo gratuito. La compañía Diamond Ridge Partners, que posee la propiedad y había tratado de desalojar al individuo implicado sin éxito, ya saludó el veredicto, manifestando su intención de "ejecutar inmediatamente la orden del tribunal y poner fin a esta ocupación ilegal".

Cuando la empresa de bienes raíces compró el inmueble en 2018, le ofreció a Hanspal 20.000 dólares para que se fuera, pero este rechazó la oferta, lo que obligó a la firma a seguir con costosas acciones judiciales y continuar pagando los impuestos prediales de una casa que no podía usar, según publicó RT.