Un interno de la Alcaidía de la Jefatura de Policía, ubicada en la zona sur de Rosario, murió este viernes tras una pelea que se dio en medio de un incendio y que dejó otros diez detenidos heridos. La mujer de la víctima fatal Miguel Saboldi, de 35 años, detenido el jueves pasado por narcotráfico, denunció que a su pareja lo mandaron a matar e involucró al intendente de Villa Gobernador Gálvez, Pedro González, en el supuesto plan criminal. El mandatario negó las acusaciones pero reconoció ser “amigo” del Japo, como se conocía al preso que falleció calcinado.

Las hipótesis del conflicto eran varias y los investigadores no descartaron que el enfrentamiento haya tenido el objetivo de eliminar a detenidos por el operativo antidrogas realizado la semana pasada en la zona rural de Alvear, en el que cayeron entre otros Saboldi. Por lo pronto, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe confirmó que el origen no fue un motín sino un "conflicto interno entre reclusos en el pabellón Nº 3”.

Norma, la mujer de la víctima, fue más lejos y gritó ante las cámaras de El Tres que a su esposo lo había mandado a matar “El Pollo Bassi”, en relación a un integrante de la barra brava de Newell´s de Villa Gobernador Gálvez con antecedentes penales. Acusó a la Policía de recibir dinero para permitir el ataque y dijo además que el asesinado del “Negro Fabio” -en principio por Fabio Hernán López, de 26 años, acribillado en la localidad vecina el martes pasado- estaba vinculado a este crimen.

La esposa de la víctima fatal también involucró al intendente de esa localidad. “Pregúntenle al gordo González”, fue el reclamo de la mujer y anticipó que le dirá a “la jueza” porque cree que asesinaron al “padre de mis hijos”. Incluso sugirió que las declaraciones del mandatario justicialista de que había que “matar” a delincuentes fue un anticipo de lo ocurrido.

"El pibe que murió era muy pero muy amigo. Tal es así que la semana que viene iba a empezar a trabajar en la Municipalidad. Lo ayudé un montón de veces", dijo González a LT3 a modo de defensa y juró no “tener nada que ver” en el hecho. Agregó que días atrás comió un asado con El Japo y la hinchada de Coronel Aguirre.

Según la denuncia de la mujer de Saboldi ante la prensa, su esposo le adelantó que tenía miedo, dijo sentirse “rodeado” y, aunque no lo precisó, dio a entender que su muerte estaba vinculada a la detención en una granja de Alvear, donde se encontraron droga y armas. 

Los heridos

El director del Hospital Clemente Álvarez (Heca), Néstor Marchetti, confirmó cuatro ingresos: el de la persona ya fallecida y tres heridos que permanecían en estado crítico. En tanto, dos lesionados fueron trasladados al hospital Roque Saenz Peña, cuatro al Centenario y uno al hospital Provincial. Uno de los internados había obtenido el alta en el transcurso de la tarde.

Sobre los heridos en el Heca, Marchetti detalló: “Uno de ellos está en cuidados críticos con quemaduras totales, otro tiene el 25 por ciento del cuerpo con quemaduras y cuenta con asistencia mecánica y el tercero, de 32 años, permanece grave en terapia intensiva con quemaduras”.

En tanto, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe confirmó este viernes a la tarde que eran diez los heridos que permanecían internados en distintos hospitales de la ciudad.