Mirian Gómez y Cristian Efraín Medina son alumnos de la Escuela Agrotécnica Provincial Nº 10 de la localidad de Quebracho, en la provincia de Formosa, un establecimiento público que alberga a unos 70 estudiantes. Juntos recibieron la más importante distinción que otorga la Organización de Estados Americanos (OEA) en la Feria Internacional de Ciencias Intel-Isef, que reconoce a los alumnos y a sus maestros de las Américas por su contribución al desarrollo integral de la región.

Los estudiantes habían sido seleccionados para este certamen por el Ministerio de Educación de la Nación, a través del Programa Nacional de Feria de Ciencias y Tecnología, y ya se habían destacado en la modalidad Educación Técnica Profesional (orientación agrotécnica) en la Feria Nacional de Educación, Artes, Ciencias y Tecnología de 2013. Tras este reconocimiento de la OEA, fueron recibidos por el titular de la cartera educativa, Alberto Sileoni, quien destacó: “Hay reservas insospechadas en las escuelas públicas argentinas. Ustedes son la exposición y la muestra del esfuerzo, la dedicación, el compromiso; y de la excelencia de la escuela pública, que puede preparar a los alumnos con los más altos niveles".

El trabajo de estos alumnos fue coordinado por la docente Natalia Lupia y consistió en describir las etapas realizadas para obtener harina, determinar la producción de frutos del algarrobo y cuantificar su rendimiento. "Su producción es una costumbre del pueblo wichi, y analizamos algunos puntos a mejorar. Cosechaban los frutos desde el suelo; nosotros propusimos colocar una malla de media sombra a un metro y medio del suelo, para que la cosecha sea más rápida y limpia. Respecto al secado, propusimos construir una estructura cerrada para secar los frutos al sol, lo que acelerará el proceso y evitará la contaminación. Y propusimos mejorar la molienda, que era a mortero, para que sea con martillos a motor, de modo de obtener la harina en forma más rápida y con menor esfuerzo físico", afirmó Lupia.