Una grave denuncia conmueve a Alvear, localidad ubicada a apenas 14 kilómetros al sur de Rosario, donde funciona un centro de rehabilitación de menores con problemas de adicciones y con la ley. Según una mujer, internos de ese lugar salieron del predio y abusaron de su hija y de una amiga, ambas de 14 años.

Sandra apuntó contra la Colonia Astengo, un lugar residencial de inclusión social coordinado por los ministerios de Desarrollo Social y de Salud de la provincia, donde también habría alojados chicos con antecedentes delictivos.

La ahora polémica Colonia Astengo fue reinagurada en 2015.
La ahora polémica Colonia fue reinagurada en 2015. (Comuna de Alvear)

Desde el móvil de De 12 a 14 (El Tres), la mujer relató: “Mi hija fue a la casa de una amiga, donde iban a estar un rato solas, y entraron tres muchachos que las invitaron a tomar algo, tenían una jarra en la que no se sabe qué había, aunque sí tenía alcohol porque los vieron comprando unos tetra bricks (vino en caja)”.

En ese contexto, y sin precisar si las chicas accedieron a compartir la bebida, se habría producido el acoso, que habría consistido, al menos, en un manoseo. De acuerdo al testimonio de Sandra, las adolescentes fueron “llevadas a una habitación donde las encerraron con llave y les dijeron groserías” antes de atacarlas, hecho por el que la hija de la denunciante presenta “marcas en los brazos y el pecho”.

La vecina de Alvear señaló que en la Comisaría de la Mujer, donde radicó la denuncia formal, le aseguraron que “no hubo violación” pero igual sostiene que la menor padece un serio trauma por lo vivido. “Cuando caminábamos me agarraba de la mano temblando, no quería ir a la escuela”, relató.

“Desde ahora la voy a tener que acompañar a todos lados y después va a tener que estar permanentemente metida acá conmigo”, dijo en una entrevista brindada desde su casa, donde espera un llamado para comenzar un tratamiento psicológico.

Más allá de reclamar justicia por lo sucedido, Sandra teme por la seguridad de todos los chicos y vecinos del pueblo. “Estos muchachos –por los internos de la Colonia– tienen que estar a la guarda de alguien, pero están en la calle o en la plaza sin ningún tipo de control. No son para estar acá, tienen prontuario, hasta por robo calificado”, advirtió.

“Al principio este centro iba a ser para rehabilitación de chicos con alto peso. Nunca nos dijeron que iba a ser para esto”, lamentó la mamá, y le pidió directamente “al gobernador que saque a estos chicos” de las calles de Alvear, comuna de unos 4.500 habitantes.