Japón sin dudas debe de ser uno de los países más fascinantes de la tierra. Fundado en el año 660 A.C, es hoy en día una de las culturas milenarias que conserva el planeta y el país vanguardia en lo que a tecnología de punta se refiere.

Tal vez ésto último se deba a su necesidad de crear soluciones prácticas a problemas complejos. Sólo basta con mirar algunos datos: Japón posee más de 126 millones de habitantes (puesto 10º a nivel mundial) que conviven y co-habitan en una superficie total de 377.835 km² (lo qu. equivale a una séptima parte de Argentina).

Esta relación de desigualdad entre personas y tierra ha obligado al pueblo nipón a agudizar el ingenio y a desarrollar infraestructura y tecnología que permita paliar sus problemas de espacio. Un claro ejemplo de esto son los estacionamientos subterráneos para bicicletas—medio de transporte más que popular en el país asiático—que funcionan a través de una compleja red de estructuras metálicas, niveles y rieles operados por precisos y veloces brazos robóticos automáticos.