Más de 600 mujeres brasileñas víctimas de la violencia de género que tenían la dentadura destruida como consecuencia directa o indirecta de esta situación, recuperaron sus sonrisas o están en proceso de lograrlo, gracias al trabajo gratuito de un grupo de dentistas voluntarios de la organización Turma do Bem (Equipo del Bien) que cuenta con 16 mil miembros y está presente en doce países, entre ellos Argentina.

"Yo no tenía coraje para mirarme en el espejo y sólo me guiaba por mi sombra", contó a Télam Regiane Mota de Oliveira sobre los años que vivió sin sus ocho incisivos porque su hermano se los había bajado a fuerza de patadas y cabezazos, y no tenía dinero suficiente para prótesis o implantes.

Beneficiaria del proyecto Apolonias do Bem (Apolonias del Bien) durante su primer año de funcionamiento en 2012, con el tratamiento gratuito Regiane recuperó mucho más que sus dientes: ahora puede comer lo que quiere, sonreír con fuerza, tener un trabajo y ser el motivo de orgullo para sus hijos.

"Antes ellos no querían que vaya a las reuniones de padres porque tenían vergüenza de mí; pero ahora me dicen «no puedes faltar»", contó la mujer que tras ser dada de alta se incorporó a la organización para trabajar en la recepción de las nuevas beneficiarias.

Creada por el odontólogo brasileño Fabio Bibancos y reconocida oficialmente como OSCIP (Organización de la Sociedad Civil de Interés Público) por el Estado Brasileño en 2002, el principal proyecto de la ONG Turma do Bem no es el dirigido a las víctimas de la violencia de género, sino Dentistas do Bem (Odontólogos del Bien).

Se trata de una iniciativa de emprendedurismo social que se vale del trabajo voluntario de dentistas que ponen sus propios consultorios, trabajo y materiales para ofrecer tratamiento odontológico gratuito a niños, niñas y adolescentes de entre 11 y 17 años con graves problemas dentales y sin recursos económicos que son seleccionados por la ONG en escuelas públicas, instituciones y fundaciones.

Actualmente, Dentistas do Bem es la mayor red de voluntariado odontológico del mundo, con 16 mil dentistas voluntarios y 58 mil beneficiarios (en tratamiento y dados de alta) en Brasil, Portugal y 10 países de América Latina, entre ellos Argentina donde funciona en Mar del Plata, La Plata, Buenos Aires, Córdoba, Resistencia y Formosa.

Crédito: Leo Franco/Turma do Bem


"Cuando cumplimos diez años me planteé «pero estoy todo el tiempo hablando de niños, como si fuera un problema sólo de ellos». Entonces conocí a La Casa de Isabel, una organización que da refugio a cinco mil mujeres víctimas de la violencia de género y decidimos hacer una selección entre las que habían perdido sus dientes para reconstruirles la dentadura", dijo a Télam Fabio Bibancos, presidente voluntario de Turma do Bem, sobre el nacimiento del proyecto Apolonias.

Reconocido como "el odontólogo de las celebridades" en Brasil, este exitoso cirujano doctorado en Salud Colectiva explicó que aunque la boca es el tercer lugar elegido por los violentos para descargar su agresión machista (después del pecho y los genitales), las políticas de asistencia a las mujeres golpeadas en Brasil no incluyen la asistencia odontológica.

"Hay que ver a las mujeres cuando terminan sus tratamiento, es una locura: todos los años lloro como un niño", explicó.

En Brasil, cada 15 segundos una mujer sufre una agresión física, según datos de las Naciones Unidas.

Ruth Orozco Mamani, de 35 años, es una de esas mujeres víctimas de violencia, que en su caso era practicada por el dueño del taller textil donde trabajó 7 años en condiciones de esclavitud, indocumentada y sin ningún tipo de salario por las 20 horas diarias de trabajo.

"Los dientes los fui perdiendo porque cuando pedía salir para ir al dentista o un adelanto, ellos se negaban. Cuando queríamos hacer compras, teníamos que ir con ellos y pagaban con dinero que nos descontaban. Si yo hubiera podido, yo misma hubiera ido a un dentista, pero tuve que seguir trabajando, incluso una vez que se me había hinchado media cara hasta el ojo", contó a la citada agencia de noticias.​

El proyecto debe su nombre al personaje histórico Apolonia de Alejandría, una mujer que fue quemada en la hoguera en el año 249, después de ser martirizada con la extracción violenta de todos sus dientes y es considerada la patrona de la odontología.

"Con el proyecto, la Turma do Bem lleva asistencia odontológica a las apolonias de hoy, que también reflejan la marca de la violencia en sus rostros. ¿Cómo superar el trauma de la violencia doméstica luciendo esas marcas?", se pregunta la organización desde su sitio de Internet.