Las fuerzas federales serán “muchas” y comenzarán a trabajar en Rosario el jueves que viene, Prefectura podrá acceder a 30 puertos privados de la región para controlar si pasan por allí cargamentos de droga, se pondrá la lupa también sobre las rutas nacionales que pasan por Santa Fe, se atacará no sólo el narcotráfico sino todo el circuito económico que se mueve alrededor, se buscará acelerar juicios y que los Tribunales no sean una “puerta giratoria” por donde los delincuentes entran y salen.

Ese es el resumen de las declaraciones que, en una nueva visita a la ciudad, realizó la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, a la salida de una reunión que mantuvo en los Tribunales federales con jueces y fiscales de ese fuero, de la que también participó el gobernador Miguel Lifschitz.

Luego de ese encuentro, la ministra se dirigió al puerto, para firmar un convenio con 30 terminales privadas de la ciudad para que Prefectura pueda patrullar en ellas.

Controlar la hidrovía, para la ministra es fundamental. Lo mismo que las rutas nacionales por donde llega la droga.

Prefectura y Gendarmería se encargarán de esa tarea y para ello la semana que viene comenzarán a trabajar más efectivos en el territorio, lo mismo que Policía Federal y Policía de Seguridad Aeroportuaria. La ministra insistió en que no iba a hablar de números y en que serán “muchos” los integrantes de esa fuerza que llegarán a la provincia.

Además, adelantó que pedirá la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) designe un representante en comité de coordinación de las políticas en materia de seguridad, pues la idea es trabajar sobre el narcotráfico y sobre “todo el dinero que mueve”. “Hay que sacarles la plata, los bienes, los autos, las casas, las quintas, los aviones”, enfatizó.

También explicó que las fuerzas federales trabajarán en dos planos: por un lado reforzará la “vigilancia ciudadana para que le gente esté más tranquila” y por el otro intentará ir “a la raíz de las bandas criminales”.

Otra tema que está en discusión es la necesidad de cambios en el nuevo Código Procesal Penal de la provincia, pues las autoridades entienden que los resultados no han sido del todo buenos. “Hay que terminar con la puerta giratoria”, enfatizó Bullrich.