Si bien es una enfermedad que se presenta en un grupo etario bien determinado, se puede observar que en un 12 % de las mujeres y en un 3% de los hombres,el acné puede continuar hasta aproximadamente los 45 años .

El acné tiene grandes consecuencias sobre el bienestar psicológico y la calidad de vida de quien lo padece, en la forma en que percibe su cuerpo y en sus relaciones con otras personas. Así no solo tiene repercusión en el paciente, porque al vivir una etapa sensible, esto repercute también en sus allegados.

¿Pero que es el acné? El llamado acné vulgar es una enfermedad inflamatoria de la piel que compromete a la unidad pilosebácea. Los folículos pilosebáceos están ubicados en la piel de todo el cuerpo, con excepción de palmas y plantas, pero en algunas zonas como la cara, el pecho y espalda, son más abundantes, y por eso son las zonas más afectadas.

¿Cuáles son las lesiones del Acné?

Clínicamente se manifiesta por la aparición de puntos blancos (comedones cerrados), puntos negros (comedones abiertos), sobreelevaciones sólidas (granos) coloradas (algunas con pus) y nódulos en la piel. La mayoría de los pacientes con esta patología son mujeres pero es más severa en el hombre. La localización más frecuente es el rostro y las lesiones del tipo pápulas y pústulas (acné inflamatorio) son las predominantes y pueden presentarse en diferentes grados de leve a severo.

¿Cómo me puedo cuidar? Tratamiento

Existen muchas opciones terapéuticas, tópicas y sistémicas, para controlar el acné. La elección dependerá del grado de acné, su extensión por cara, pecho o espalda, edad y sexo.

También hay que evaluar el impacto psicológico y la resultante calidad de vida de cada paciente en particular, lo cual incide directamente en la adherencia y la respuesta al tratamiento. Algunas personas sienten vergüenza y consideran que tienen mala apariencia, con una baja autoestima, debido a esta enfermedad.

Es importante tener en cuenta dos factores que conducirán al éxito del tratamiento:

- Utilizar productos de primera calidad.

- Tener paciencia y constancia y adherencia total.

El uso de productos cosméticos inadecuados (cremas nutritivas, algunos maquillajes) o fórmulas “caseras”, suelen no resolver el cuadro e incluso empeorarlo Por eso el tratamiento debe ser orientado por un médico dermatólogo que examinará la piel y sabrá indicar el abordaje más apropiado.

*La doctora Marcela Bozzini es miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD)