La Cámara de Apelaciones en lo Penal confirmó en la mañana de este jueves la condena a prisión perpetua para un joven que mató a una joven de 23 años y a su hija de 4 en el barrio La Lagunita para encubrir un robo. El doble homicidio tuvo lugar el 20 de enero de 2013.

El tribunal conformado por los jueces Gustavo Salvador, Gabriela Sansó y Bibiana Alonso confirmaron la pena contra Jonatan Olivera. En noviembre del año pasado ya había sido sentenciado a prisión perpetua en primera instancia al ser considerado como autor de homicidio criminis causa en concurso real con el delito de robo.

Aquella mañana del 20 de enero de 2013, Jonatan Olivera ingresó por la ventana de una casa de barrio La Lagunita para robar. En ese momento se encontró con Laura, una joven de 23 años que se estaba por ir a trabajar. La mujer intentó resistir el asalto. Sin embargo, el delincuente la encerró en el baño y la golpeó contra las paredes y los sanitarios. Por los traumatismos sufridos murió. 

Cuando escucharon los gritos de la joven, sus hijos de siete y cuatro años se despertaron. La más pequeña se acercó al ladrón y lo reconoció. "Ya te vi, Joni. Vi que sos vos", comentó. En ese momento, el maleante la asesinó de tres martillazos en la cabeza a la pequeña.

Una vez que mató a la mamá y a la hija, sustrajo todos los objetos de valor que halló en el interior del inmueble, los envolvió en el mantel de la mesa de la cocina, salió por la puerta que daba al patio y se fugó por los techos de las casas linderas. En la huida por reconocido por vecinos.